Si una catástrofe no hace saltar por los aires en el último minuto el acuerdo entre PSOE, Udival y BNG, el alcalde popular de O Valadouro, José Manuel Lamela, tiene las horas contadas como propietario del bastón de mando de un concello, de poco más de 2.000 habitantes. Su salida forzosa se producirá tras la presentación de una moción de censura, para lo que habrá que esperar, previsiblemente, hasta el mismo viernes, justo el día en que expira el plazo de un mes para debatir la cuestión de confianza planteada por el regidor.
Lamela gobierna desde hace dos años el Ayuntamiento en minoría, lo que le ha impedido sacar adelante diversos proyectos, entre ellos el propio presupuesto municipal, que sigue prorrogado. La falta de entendimiento con el resto de grupos convirtió su gestión en una auténtica odisea.
¿Será posible algo similar en Foz?
La alcaldía de Foz es otra que el PP tiene cogida con pinzas en la comarca. Desde que asumió el gobierno, Javier Castiñeira, tiene la espada de Damocles sobre su cabeza, aunque la falta de acuerdo del resto de grupos le permite seguir al frente.
Guerra
El planteamiento de una moción de censura provocó una guerra interna en el PSOE, por la oposición de varios de sus concejales, que no respaldaron la idea de su portavoz.