Una familia sigue en O Celeiriño mientras derriban las casas dañadas

El Ayuntamiento de Viveiro comunicó a la única familia que todavía reside en el barrio vivariense de O Celeiriño, cuyos inmuebles fueron desestabilizados por las obras de construcción de un nuevo edificio, el inicio de los trabajos de desarme manual de las viviendas adyacentes, al objeto de que tome las precauciones oportunas para evitar riesgos. Se trata de Dolores Prieto y su marido, quienes regresaron a su casa en noviembre del año pasado, un mes después de que se cayese la viga al solar tras ceder por la presión del muro de contención que sostiene la calle Atalaya y los inmuebles que dan al frente de ésta.

La familia, que estuvo durante meses sin luz ni agua, continúa en su domicilio, aunque ahora cuenta con esos servicios. De momento, las tareas de desmantelamiento de las casas no les afectaron, aunque este martes ya escucharon los primeros ruidos, puesto que los operarios se acercan a la zona de la vivienda por la que empezaron la demolición más próxima a su inmueble.

Los trabajos de desmantelamiento ya comenzaron la semana pasada. El proyecto de demolición, que redactó la firma Proitec, está siendo ejecutado por operarios de Cubafer, otra empresa que trabaja en el área de A Mariña lucense. Los obreros llevan a cabo la actuación con el máximo cuidado y actúan desde la parte superior de las viviendas para salvaguardar su vida ante la posible caída de algún muro de las mismas.

Los operarios ya tienen casi despejada la cubierta de la primera casa, zona por la que retiran enseres personales de los propietarios que fueron desalojados, así como los escombros, desde las pizarras que conformaban el tejado hasta las vigas de madera, para lo que se valen de unos cestos y unas tolvas que suben con grúas. Las calles están cortadas y la zona acordonada para evitar riesgos.

El último paso consistirá en tirar la fachada, que caerá dentro del área controlada en que se acometen los trabajos, que este martes detuvieron un momento para que Telefónica retirase aún algunos cables. Los muros transversales quedarán para dar estabilidad a las casas colindantes. La primera casa por la que empezaron los derribos quedará lista a finales de este mes, si se cumplen las previsiones que baraja el arquitecto de la firma Proitec.

Movimiento
Por otra parte, este martes por la tarde camiones y palas estuvieron trabajando también en el solar del futuro edificio para rellenarlo de tierra. Es posible que esta media responda a la necesidad de asegurar también esa zona.

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