Es difícil conseguir grandes resultados y un volumen de facturación muy elevado, pero la idea del comercio justo se va asentando en As Pontes a través de Manantío, una tienda que lleva una década luchando por acabar con la explotación laboral y la discriminación y pagar el precio que se merece al productor.
«Si la tienda se mantiene diez años después, es que la cosa está arraigada», explica Celia Freire, que junto a Manoli Tembrás, se encarga del funcionamiento de este negocio solidario.