Una campaña busca el cierre de las granjas peleteras de Galicia

La Asociación Animalista Libera ha iniciado una campaña para demandar el cierre escalonado de las granjas peleteras de Galicia, alrededor de 40 instalaciones ubicadas en prácticamente todas las provincias de la comunidad, y que según los defensores de los animales son una evidente fuente de problemas de todo tipo: ambientales, sanitarios y humanos.

Estudios independientes, como el realizado por la organización CE Delft con más de tres décadas de experiencia en el desarrollo e investigación de situaciones negativas para el medio mbiente, advertían ya hace unos años, señala Libera en un comunicado, del peligro ecológico de estas fincas.

Y alertaban, prosiguen, de que la producción de piel de visón supera los indicadores de cambio climático en 16 de los 18 factores de estudio como el óxido nitroso, los niveles de amoníaco generados o el gran consumo de agua que requiere.

A la entidad belga se la une la investigación elaborada por la Humane Society of United States (HSUS), la mayor organización de protección animal del planeta, que cuenta con aproximadamente 10 millones de socios y que alerta sobre el empleo habitual de productos altamente tóxicos para el ser humano durante el proceso de elaboración de la peletería. Parte de estos elementos han sido calificados por agencias americanas de salud pública como potenciales cancerígenos.

En este sentido la campaña 'Galicia mellor sen peleteiras' lanzada este domingo por los animalistas plantea un cierre progresivo y un programa de reconversión empresarial que ayude a recuperar la degradación producida por las granjas. La alta concentración de purines y el formato intensivo "acaban deteriorando" los entornos en donde se ubican, sin olvidar que cada año Galicia "masacra" a más de 200.000 animales para satisfacer las cuentas de resultados del lobby peletero.

Como apunte el colectivo animalista pone sobre la mesa la situación de excepcionalidad que el propio gobierno español ha otorgado a estas instalaciones de riesgo biológico.

El visón americano, especie empleada en las granjas de la comunidad gallega, no está considerado como una especie invasora, a pesar de su implantación masiva en el territorio español a través de estas granjas. Las fugas producidas durante la década de los 80 amenazan la fauna autóctona y al "primo protegido" de este mustélido, el visón europeo, en peligro crítico.

Los animalistas impulsan una campaña que incluirá el reparto de alrededor de 50.000 folletos en los municipios y el próximo desarrollo de un compromiso "ético" que cualquier ciudadano podrá firmar, en donde asume que no participará de este negocio ni portará prendas de peletería.