Una acusada de estafar a viajeros pacta con el fiscal

El juicio previsto este miércoles en el juzgado de lo Penal número 2 de Lugo contra la antigua propietaria de una agencia de viajes en el municipio lucense de Ribadeo por estafar a los clientes de su negocio fue finalmente suspendido por el acuerdo de conformidad al que llegó la acusada con el ministerio público.

El fiscal pedía inicialmente para la acusada una pena de algo más de cuatro años de prisión por un delito de estafa continuada, pero la mujer llegó a un acuerdo con el ministerio público del que se informará este jueves a las partes en la sala de vistas.

En el escrito de acusación, el ministerio público explica que la empresa cuya franquicia gestionaba la acusada a través de su agencia de viajes en Ribadeo decidió resolver el contrato con ella al detectar "irregularidades en el proceder" de A.M.F a finales del año 2009, con lo que también revocó las licencias de uso de la marca comercial y las reservas realizadas.

Sin embargo, durante el año 2010, la acusada siguió comercializando en su agencia, con "ánimo de ilícito enriquecimiento", "vuelos o paquetes turísticos" que los clientes pagaban en metálico o mediante tarjeta de crédito".

La propietaria de la agencia, "para aparentar normalidad", facilitaba a los clientes "documentación y datos concretos" sobre el producto que acababan de pagar, como los "localizadores de los vuelos" o los números de las reservas que, al no ser abonadas por la acusada, no llegaban a ser confirmadas.

"Cuando los clientes llegaban a coger sus vuelos o a los hoteles previstos, se encontraban sin billetes o sin habitación", explica el ministerio público, de forma que en algunos casos "se quedaban literalmente tirados en los aeropuertos y no tenían otro remedio que comprar personalmente los billetes de avión si quería viajar".

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