Una mujer de 33 años, vecina de Monforte y exdeportista de élite, salvó milagrosamente la vida después de precipitarse con su coche a la cola del embalse de Os Peares, a unos dos kilómetros de distancia de la localidad de Belesar. La joven fue capaz de mantener la sangre fría suficiente para, mientras se hundía dentro del turismo, abrir una de las puertas, bucear unos ocho metros hasta la superficie y trepar por la pendiente que separa la carretera, el corredor fluvial de A Cova, del río y llegar a la calzada.
Ahí no acabó su arrojo, ya que a la hora en la que se produjo el accidente, en torno a las cuatro de la noche del pasado día 28 de diciembre, la mujer, que pidió encarecidamente que no fuese facilitada su identidad, se dio cuenta de que empapada y con la temperatura ambiental bajo cero podría sufrir una hipotermia. La decisión que tomó fue echarse a correr hasta que, otra vez, milagrosamente, unos amigos la encontraron a cinco kilómetros de Belesar.