Un vecino sintió ''problemas para respirar'' por el ''humo tóxico''

Los bomberos comprobaron que ya no quedaban rescoldos del fuego en El Gandul. El inmueble en el que se encuentra este pub quedó completamente calcinado y su tejado se vino abajo. El propietario de este local de ocio nocturno, Juan Rogero, siguió en tod
photo_camera Los bomberos comprobaron que ya no quedaban rescoldos del fuego en El Gandul. El inmueble en el que se encuentra este pub quedó completamente calcinado y su tejado se vino abajo. El propietario de este local de ocio nocturno, Juan Rogero, siguió en tod

Una de las ocho personas que fueron desalojadas debido al fuego que destruyó dos locales de ocio nocturno, Carlos Longarela, aseguró que cuando tuvo que abandonar su vivienda por primera vez, pasadas las cuatro de la madrugada, tenía «problemas para respirar» porque el humo que salía del pub La Noche era «tóxico». Lo atribuyó a la combustión del aislamiento acústico. Llegó a decir que parecía que «te quedabas pajarito».

Carlos Longarela, que asegura ba horas después que se encontraba «aún con el susto en el cuerpo», explicó que, cuando alrededor de las seis de la madrugada estaba de vuelta en casa tomando un café reparador, comenzó a apreciar un olor diferente, a «madera quemada». Estaba ardiendo El Gandul. De nuevo tuvo que desalojar el edificio.

La vivienda de este vecino sufrió algún desperfecto. Tuvo una pequeña fuga de gas, que rápidamente reparó; le entró hollín en una de las habitaciones y le apareció una pequeña grieta en un muro medianero de la terraza posterior.

El personal de las dos oficinas que se encuentran justo encima del pub La Noche no pudieron acceder hasta última hora de la mañana. Apenas sufrieron daños. Eduardo González, que es el jefe administrativo de un despacho de habilitado de clases pasivas, explicó que el hollín manchó ligeramente las paredes y que se le escarchó el techo en una esquina.

Una empleada de la inmobiliaria Vivendi, Mónica Expósito, indicó que cuando entró en la oficina se encontró con que «todo estaba lleno de humo». Además, los bomberos utilizaron esta estancia para acceder con una manguera a la parte posterior de El Gandul para sofocar los rescoldos que quedaban.

En esta inmobiliaria tuvieron electricidad, pero no les funcionó el teléfono y se quedaron temporalmente sin internet. Además, por un respiradero que tienen en el techo del baño goteaba agua de la que se utilizaba para extinguir el fuego. Mónica Expósito explicó que el suelo se llenó de hollín en un par de puntos porque entró por las bases de la antena de televisión y del teléfono.

PRECEDENTES
Otro aciago día 2 en la Rúa Nova

En la madrugada de otro día 2, pero de noviembre de 2010, las llamas devastaron un establecimiento de hostelería que estaba en el inmueble número 9 de la Rúa Nova, que hacía apenas un mes que había abierto sus puertas al público.

Desalojo

En aquella ocasión tuvieron que abandonar sus casas unos quince vecinos y el propietario cuantificó los daños en unos 150.000 euros.

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