El vecino de Vilar de Sarria Eugenio Márquez Andrés ha presentado una denuncia en el juzgado de instrucción de la villa contra el alcalde, Claudio Garrido, al que acusa de actuar «en connivencia» con otros propietarios «permitiéndoles dañar un camino público y hacer un cierre que afecta a ese camino sin contar con la preceptiva licencia urbanística».
En su denuncia, que tuvo entrada en el juzgado el 19 de mayo, Márquez explica que posee una vivienda en una parcela que limita con el camino público de Barreiros, con el que también linda la finca de un matrimonio, formada por la unión de otras dos. Estas últimas «estuvieron separadas desde siempre por una gavia o cauce que recogía las aguas de las fincas que se encuentran a nivel más elevado que el camino», si bien la pareja «procedió a tapar el cauce mediante su relleno con tierra», relata.
Según su versión, la desaparición de la gavia ocasiona inundaciones en épocas de intensas lluvias, de modo que el camino «queda impracticable» para el paso de vehículos, personas y animales, mientras que la finca del denunciante resulta «afectada por el agua de manera importante».
Afirma también que, en una ocasión, incluso se inundó una pequeña edificación de su propiedad, donde murieron «ahogadas» varias crías de cordero.
Eugenio Márquez sostiene que, para solucionar estos problemas, se llegó a un acuerdo con el concejal de obras mediante el cual el matrimonio se comprometía a ceder un trozo de su finca para que el Concello hiciese una cuneta. No obstante, dice, sus vecinos «en lugar de ceder terreno de su finca procedieron a colocar postes de hormigón para cerrarla prácticamente al borde del camino». Como consecuencia, sólo se hizo una zanja de 70 centímetros que, además, «invadió el camino».
En febrero, el denunciante reclamó la presencia de la Policía Local para levantar atestado porque, según indica, la pareja utilizó una pala y un camión para cerrar con postes su finca, «depositando ramas, vegetación, tierra y otros restos que taponaban la cuneta e impedían el paso por el camino».
Treinta euros
Eugenio Márquez asegura haber presentado múltiples escritos en el Concello reclamando que se adopten medidas «para la reposición de la legalidad urbanística en cuanto al cierre y el camino», sin haber recibido contestación. Es más, asegura que pidió copia del atestado a la Policía Local, para lo cual abonó 30 euros de tasas, pero el documento no le fue entregado. «Me dijeron que no podían entregarme copia del atestado porque había órdenes superiores de que no se me entregase bajo ningún concepto», dice.
Según su denuncia, el alcalde le dijo «que no iba a arreglar el camino ni tomar medida alguna en relación al cierre». El vecino acusa al regidor de «desatender su obligación de defender y proteger un camino de titularidad pública», de ignorar su escritos y no tramitar expediente al respecto «con el ánimo de favorecer a una persona». Dice también que se dirige a él «en tono de burla en público» y que ha tratado de «coaccionarle» para que retire la denuncia ante la Policía, por lo que pide al juzgado que investigue si puede haber delito.
EL REGIDOR
- «No se ha beneficiado a nadie». El alcalde de Sarria en funciones, Claudio Garrido, defendió que, en el caso del camino de Vilar de Sarria, se actuó conforme a la ley. «No se ha beneficiado a nadie», afirmó el regidor, quien dijo que el matrimonio propietario cedió entre 1,5 y 2 metros de terreno de su finca para ampliar el camino de titularidad pública y construir una cuneta.
- Ampliación. «Se cedió el terreno, el Concello ensanchó el camino, se hizo la cuneta para sacar las aguas y el propietario volvió a cerrar su finca con postes de hormigó. Se han hecho todos los pasos igual que en cualquier otro camino de Sarria», dijo. Según su versión, el cierre de la finca está dentro de la propiedad de los vecinos y no invade el camino público.
