Un hombre con iniciales J.M.V.R. y sus dos hijas -M.B.V.P. y N.V.P.- podrían ingresar en prisión por intentar estafar a una compañía aseguradora. Los hechos se remontan al año 2009, cuando una de las chicas sufrió un accidente de tráfico en el municipio de Cospeito y los tres acusados idearon un plan para fingir que iban los tres en el coche, consiguiendo así cobrar del seguro algo más de 6.000 euros por gastos de atención médica.
Tras descubrirse el entuerto, los tres familiares fueron acusados de estafa y el ministerio fiscal solicitó para ellos sendas penas de dos años de cárcel, una condena que no supondría la entrada en prisión, al carecer de antecedentes. Sin embargo, la compañía aseguradora los considera autores de un delito continuado de estafa -ya que después de cobrar los 6.000 euros reclamaron unos 100.000 más por la vía civil- por lo que pide penas de tres años y nueve meses de cárcel.
«Nos hacía falta el dinero, pero nos arrepentimos»
En su declaración ante el Tribunal, los tres acusados explicaron que en el momento de los hechos estaban atravesando una mala situación económica. «Nos hacía falta el dinero, pero nos dimos cuenta de que estábamos haciendo mal y nos arrepentimos», declararon las jóvenes. Su progenitor pidió incluso perdón ante la Sala.
