Un joven resulta herido tras ser corneado por un toro

Un joven australiano resultó corneado en Pamplona (norte de España) en el segundo encierro de los sanfermines 2011 por un toro descolgado que creó repetidos momentos de peligro durante la carrera.

Tras los tres cánticos en los que los mozos piden protección al santo frente a la hornacina con su imagen situada en la Cuesta de Santo Domingo, el cohete anunció a las ocho en punto de la mañana la apertura de las puertas de los corrales situados en este lugar.

Desde el principio, incluso antes de que se produjera el contacto con los corredores, los toros tomaron la iniciativa de la carrera y uno de ellos se adelantó para conducir a sus hermanos en un recorrido que por este tramo discurrió sin más incidencias que las habituales caídas.

Con tres bureles en cabeza, la manada entró en la plaza del Ayuntamiento, donde comenzó ya a estirarse hasta que, al llegar a Mercaderes, el toro colorado resbaló y se quedó definitivamente descolgado.

Por delante, dos hermanos también resbalaron aunque sin llegar a influir en su carrera, traspasando la curva de forma limpia y sin registrar esos choques contra el vallado que eran tan habituales antes de que el Ayuntamiento optara por utilizar un líquido antideslizante.

La velocidad fue una de las características del encierro a su paso por la calle Estafeta, donde, con dos toros abriendo manada, los animales dejaron bastantes huecos entre ellos y permitieron a los corredores acercarse a sus astas.

Los pastores, mientras tanto, se afanaban por conducir al rezagado hacia Telefónica y el callejón de acceso a la plaza de toros, donde sus hermanos entraron sin problemas pese al amago de dar la vuelta al ruedo que han realizado algunos de ellos.

Cuando ya en la plaza los pastores seguían en su empeño, un corredor, sin ser consciente del peligro que ello conllevaba, se cruzó ante el toro colorado, que lo embistió.

El mozo, un joven australiano, fue trasladado a la enfermería de la plaza de toros con una cornada en el muslo.