Un incendio forestal quemó este martes 0,4 hectáreas de monte arbolado y raso en el municipio de Ourol. El fuego, que se declaró hacia las dos y media de la tarde, quedó controlado a las cuatro menos veinte, aunque los medios de extinción desplazados al lugar aún continuaron hasta las cinco de la tarde con la refrigeración del terreno para evitar que el foco se reavivase. Esta labor se hizo debido a que soplaba el viento con cierta intensidad en la zona.
La Consellería de Medio Rural e do Mar desplazó al lugar un agente forestal, cinco brigadas, tres motobombas y dos helicópteros. Todo apunta a que el fuego pudo ser fortuito, a causa de que alguna persona arrojó desde un vehículo una colilla de tabaco encendida. Sospechan que pudo originarse junto a la carretera autonómica LU-540, que conecta Viveiro con Cabreiros.
El foco se registró en el lugar de A Casabella, en cuyas cercanías hay varias aldeas, pero no alcanzó las viviendas. La más próxima estaba en el lugar de Couce, aunque afortunadamente el fuego no llegó hasta ese punto por la existencia de una pista y una vía de servicio, que actuaron como freno para las llamas, que en un primer momento sí lograron saltar uno de los viales. El resto de aldeas cercanas, que están en un radio de entre 200 a 500 metros, son Mosende, Escourido y Os Calviños.
Los vecinos dieron la voz de alarma al Concello y este avisó a Medio Rural, que ya tenía conocimiento, pero aún no había llegado al lugar. El denso humo atravesaba la carretera general, razón por la que hubo que señalizar la vía y Protección Civil colaboró dirigiendo la circulación. "Case non se vía nada", confesaba el responsable del servicio, José Ramón Seara Arís, quien precisó que ardieron un eucaliptal y un pinar pequeños, y también maleza del talud.
El alcalde de Ourol, José Luis Pajón, que acudió inmediatamente al lugar de los hechos y colaboró en las tareas de extinción para evitar que el fuego cruzase de nuevo la carretera, explicó que ardió un montón de biomasa acumulada en un monte cortado recientemente, donde el propietario ya tiene hechos los agujeros para repoblar, además de los matorrales y árboles. "Foi unha franxa xunto da estrada, afortunadamente non pasou dalí", dijo.
