Un hombre de nacionalidad portuguesa e iniciales M.P.S. fue juzgado ayer en la Audiencia Provincial de Lugo como supuesto autor de un delito de abusos sexuales contra una joven a la que conocía, en un monte de Viveiro. En el transcurso de la vista oral, el acusado indicó que las relaciones fueron consentidas y justificó las lesiones vaginales que presentaba la chica en la postura que adoptaron al realizar el acto sexual en el coche, la condición de virgen de la joven y el gran tamaño de su propio pene, que definió como «más grande que de lo normal», aunque sin especificar medidas.
La Fiscalía solicitó cuatro años de prisión para el acusado, mientras que la acusación particular elevó su petición a seis. La defensa exigió la libre absolución.
Los hechos juzgados sucedieron en junio de 2010 en Viveiro. Tanto la víctima como el supuesto agresor coincidieron en que ambos se conocían de antes, de verse en la cafetería en la que trabajaba ella. En la tarde del día 21 de junio de 2010, él invitó a la joven a montar en su coche y se desplazaron hasta la zona del monte de San Roque, donde él iba a enseñarle a ella la conocida capilla donde se celebra una fiesta popular.
