Tres parroquias de Monforte estuvieron sin suministro de agua durante dos días

Los vecinos dicen que Aqualia no atiende las averías con rapidez y piden el mismo trato que se da al casco urbano

Los vecinos de las parroquias monfortinas de Chao do Fabeiro, Seoane y Baamorto estuvieron más de dos días con problemas en el suministro de agua y se quejan de que para que Aqualia, la empresa encargada del servicio, les hiciese caso tuvo que mediar el Ayuntamiento porque la concesionaria no atendía sus demandas.

Los problemas comenzaron el jueves cuando bajó la presión del servicio en la parroquia de Chao do Fabeiro y en las dos siguientes (Seoane y Baamorto) se quedaron completamente sin agua. Varios afectados llamaron a Aqualia pero, según afirman, en todo el día no recibieron ninguna respuesta concreta, ni siquiera lograron que nadie fuese a comprobar si había una rotura en la red o si se trataba de un problema de escasez como en veranos anteriores.

El viernes por la tarde, al ver que el problema no se solucionaba, un par de vecinos llamaron directamente al Ayuntamiento de Monforte que desplazó a la parroquia al responsable de servicios, José Luis Losada. El concejal medió y finalmente ayer por la mañana una brigada arregló la avería que les tenía sin suministro.

Pero el enfado de los vecinos no cesó. Aseguran que se sienten discriminados en comparación con el casco urbano. «Cansámonos de dar parte a Aqualia e por aquí non veu ninguén. Sabemos que a rede de auga de Monforte é un polvorín e que estes días tamén houbo problemas na Rúa Corredoira pero nós tamén pagamos impostos e queremos o mesmo trato ca os residentes na cidade», explicó ayer una afectada.

Defienden que todos los años tienen problemas cuando llega el buen tiempo porque la demanda de agua aumenta y no hay para todos. Dicen que en esos casos en los que hay que hacer restricciones, Aqualia no les comunica en qué horas les dará servicio. Además, si hay una avería como ocurrió el jueves la incertidumbre ya es total.

El PROBLEMA. El alcalde de Monforte, José Tomé, lamentó ayer lo que ocurrió en las parroquias y reconoció que estar sin agua era algo muy molesto.

Especificó que las parroquias afectadas se surten de una misma tubería que parte del depósito de O Cornado y que el jueves rompió en la zona de Carrouba, en la parroquia de San Juan de Tor, por eso en las poblaciones posteriores al punto de rotura hubo o bien problemas de presión como en Chao do Fabeiro o de falta total de suministro como en las de Seoane y Baamorto.

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