Un accidente entre dos vehículos en la parroquia focense de Santa Cilla se saldó con tres heridos leves que fueron trasladados al Hospital da Costa de Burela. El choque se produjo sobre las seis y media de la tarde en la carretera LU-152 que une las localidades de Foz y de O Valadouro, en el kilómetro 6.
La colisión se produjo, según relatan los testigos, porque uno de los conductores implicados, que iba en dirección Ferreira, perdió el control de su vehículo. Al menos así lo habría reconocido esta persona poco después del accidente, probablemente causado por la lluvia. Tras esa pérdida del control del turismo, colisionó contra el coche que iba en dirección a Foz, produciéndose el choque entre ambos. Una conductora se quejaba de un golpe en la rodilla, mientras que en el otro vehículo viajaba una mujer con un niño menor de edad, y ambos padecían dolores en el pecho y en las costillas, provocados muy probablemente por el cinturón de seguridad.
El accidente fue bastante espectacular, y los dos coches sufrían daños muy importantes en la parte delantera. Además, uno de los vehículos chocó con una farola, que dobló, en una zona donde hay muchas viviendas unifamiliares. El accidente se produjo al lado de una casa que, amablemente, abrió sus puertas para que fueran atendidos en un primer momento los heridos. Hasta el accidente se trasladaron el 061, la Guardia Civil de Tráfico y Protección Civil de Foz.
VILAXE . El servicio de emergencias 112 Galicia llegó incluso a avisar a los bomberos de Barreiros tras recibir el aviso de un espectacular accidente en la N-640, por el que el vehículo quedó con las ruedas hacia arriba. En un primer momento, se creyó que la persona que lo conducía podría necesitar ser excarcelada, pero no fue así. Ni siquiera se requirió que se desplazasen a la zona las ambulancias del 061.
La conductora, de A Mariña oriental, salió por su propio pie del vehículo, pese a haber volcado al salirse del vial, en un punto, el de Vilaxe, en el que no se registran demasiados accidentes.
El estado de la calzada, que estaba resbaladiza por las últimas lluvias, se baraja como el principal motivo del incidente, que tampoco causó retenciones en el tráfico de la zona hasta que llegó la grúa para retirar el turismo.
Tráfico y los efectivos del Grupo de Emerxencias Supramunicipal (Ges) de A Pontenova asistieron a la accidentada.
REME-VILAMAR. El alcalde de Barreiros, Alfonso Fuente, recuerda que desde hoy y hasta el viernes estarán cortados al tráfico cuatro kilómetros de la carretera que une Ribadeo y Barreiros por el interior, entre las parroquias de Reme y Vilamar. Se cerrará mientras duren las obras de mejora del firme, que financia la Xunta. Intentarán, pese a las inclemencias meteorológicas, aglomerar el vial, por lo que se recomienda utilizar las vías alternativas.
AUTOVÍA. El Alto do Fiouco de la Autovía del Cantábrico (A-8) permanecía cortado al tráfico al cierre de esta edición debido a la densa niebla que impide la visibilidad en la zona. La circulación por el trazado que salva Mondoñedo se prohibió desde las seis y diez de la tarde del domingo, por lo que acumula más de un día de cierre.
Además, lás cámaras que la Dirección General de Tráfico instaló en el trazado de O Fiouco no estaban operativas en internet.
