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Tradime ve "vergonzosa" la ausencia de medidas para evitar los cierres de la A-8

La autovía reabrió este viernes por la mañana, tras tres días y medio de cierre por la niebla ► Los usuarios avanzan que si el nuevo radar salta a 60 por hora será mejor ir por la N-634
Glorieta cercana al desvío hacia el Alto do Fiouco, con abundante bruma
photo_camera Glorieta cercana al desvío hacia el Alto do Fiouco, con abundante bruma

La asociación de empresarios del transporte discrecional de Lugo (Tradime) califica de auténtica "vergüenza" lo que ocurre con la Autovía del Cantábrico (A-8) a su paso por Mondoñedo, debido los cierres continuos a causa de la niebla, que este viernes se disipó y permitió reabrir a las siete y cuarto de la mañana, tras más de tres días seguidos sin uso. El vicepresidente del colectivo, José Manuel Flores, considera inaudita la falta de medidas para evitar los cortes "con el tiempo que pasó desde que se inauguró", en febrero de 2014. "Esto no ocurre en ninguna parte del mundo", ratifica. 

El directivo del transporte expresa su malestar porque cada vez que viaja fuera de Galicia le recuerdan la situación. "Todos te lo dicen y cada vez que debes usarla ya vas pensando si estará cortada. Es un trastorno", que los asociados de Tradime sufren en sus propias carnes, tanto para trasladar mercancías de la costa al interior como cuando transitan hacia otras comunidades, como Asturias, pues deben desviarse por la antigua N-634. José Manuel Flores considera que construir la autovía por ese trazado fue "un fallo grande de Fomento, porque ya se sabía que era un foco de nieblas". 

Iván Marrube, director comercial de Reyco: "Deseñaron unha infraestrutura para mellorar as comunicacións e ao final empeorouse a situación anterior"

El director comercial de la firma mariñana Reyco, Iván Marrube, comparte su parecer y atribuye lo ocurrido a la "incompetencia" de las administraciones, que "coa súa mala planificación deseñaron una infraestrutura sen fundamento para mellorar as comunicacións e ao final empeorouse a situación anterior, porque cando máis a necesitas, non podes usala. Estas son as consecuencias de pasar a autovía por onde non debía facerse", recalca antes de añadir que el viento es otro peligro, porque en días de temporal "arranca os toldos dos camións". 

La salida natural por carretera para las mercancías de A Mariña, que incluyen desde alúmina hasta tableros o madera pasando por pescado, entre otras, queda así condicionada, pero además "á xente de todo o norte lle choca que se desvíe hacia o interior e non vertebre toda a costa cantábrica", explica Marrube, quien tilda de "cachondeo" que "despois de gastar moito diñeiro volvas ao pasado e incumplas en tempo, porque a autovía está pechada e iso non podes prevelo". 

El transportista mindoniense Marcos Cabanas es de los menos afectados, porque al tener su empresa sede en Mondoñedo ya deben bajar a la localidad, pero coincide en que la situación es "vergonzosa", porque en las últimas jornadas cerró el día entero "e penso que podían abrir nas horas centrais. É decepcionante que peche mañá e tarde", aunque reconoce que "a visibilidade é moi reducida con néboa pecha".

Marcos Cabanas, transportista de Mondoñedo: "As únicas melloras foron para reducir a velocidade ou para desviar o tráfico máis fácil, non para poder usala"

Además, incide en que las mejoras efectuadas hasta ahora "foron para reducir a velocidade ou para cortar máis fácil, non para poder usala". Este camionero tampoco entiende "por que o trazado sube 200 máis que o orixinal da Xesta", pues el Alto do Fiouco está a casi 700 metros y la Xesta a unos 500. "O consumo dos camións aumenta ao ter que salvar ese maior desnivel", señala. 

MALA ALTERNATIVA. La alternativa ante los cierres es la N-634, una carretera de 30 años sin zonas de adelantamiento, tras pintar con línea continua las que existían, según indica Cabanas, quien indica que sus abundantes curvas suponen un riesgo. "Se se fai é para mellorar, pero se ao final tes que ir por unha estrada en condicións peores, trasládate unha maior inseguridade". 

"É un asunto moi comentado na Mariña. A xente empeza a tomalo a chiste porque é incrible que estea pasando isto. ¡Case catro días de peche é unha barbaridade!", matiza el taxista ribadense Antonio Valea. Los cierres le repercuten por la demora en el desplazamiento a destinos como el Hospital de A Coruña o al de Lugo, ya que algunos de sus clientes acuden a este último a recibir sus tratamientos para la diálisis. "A solución máis barata parecen estar sendo os radares. Pero se ao final van poñer un dispositivo que salte cando vas a 60 kilómetros por hora porque hai moita néboa é mellor e máis rápido ir pola N-634", opina.

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