Sumar con el método Sacra

Sacra, en el centro. TOÑO PARGA
photo_camera Sacra, en el centro. TOÑO PARGA

SACRA ES UNA golden retriever de siete meses, ágil, juguetona y cariñosa y Minia Pardo es su dueña, una joven chantadina que estudió terapia ocupacional y que se desplazó a Barcelona para ampliar su formación en tratamientos y actividades con perros. Cuando Minia Pardo se fue a Barcelona ya llevaba en mente un proyecto con canes para los usuarios de la residencia de mayores que lleva la firma Geriatros en Chantada y al regresar de Cataluña compró a Sacra y contó con el respaldo de Geriatros para sacar adelante el proyecto.

Ahora son la pareja estrella del centro y cuando Minia entra por la puerta con Sacra de la correa el ambiente ya cambia en la residencia. Lo peor es que cuando Minia entra en el centro y no lleva a Sacra porque le toca descanso o porque se recupera de una intervención del veterinario la ilusión se desvanece en muchas caras.

La terapeuta ocupacional explica que los perros son especialmente estimulantes para los mayores y que no suponen una gran alteración en la programación y el ritmo de trabajo del centro. Es decir, la residencia de mayores sigue con su actividad habitual y con sus talleres y el día que llega Sacra los usuarios tienen en la perra un estímulo que surte efecto. Para entendernos, explica Minia Pardo, «si toca un taller de memoria con números y cuentas los usuarios hacen la actividad porque saben que les conviene. Pero si ese día Sacra está en el taller, pues los usuarios hacen la actividad con muchas más ganas porque se divierten con ella».

Siguiendo el ejemplo, en los talleres de números Sacra es la encargada de elegir las cifras que hay que sumar. ¿Que cómo lo hace?, entre varios números depositados en el suelo se acerca a algunos de ellos. Y no es lo mismo sumar 12+7 porque lo dice una terapeuta que hacer la suma si las cifras las elige Sacra. Lo que cambia es el ánimo y aumenta la atención.

Esta golden retriever llegó a Geriatros en febrero y está en su primera fase de entrenamiento para actuar con mayores, en la fase de obediencia, lo que quiere decir que su apoyo en actividades es todavía limitado, pero en poco tiempo será capaz de realizar apoyos más complejos y formar parte de dinámicas y juegos más elaborados, explica Minia Pardo.

GRANDES DEPENDIENTES

El trabajo de Sacra no es sólo válido con las personas más autónomas. Los perros tienen la capacidad de motivar a aquellas personas con mayor grado de dependencia y despertar en ellas ganas de moverse para acariciarlos. «Hay pacientes con los que los terapeutas nos desesperamos porque probamos mil técnicas para motivarlos y no hay manera y es en esos casos en los que la intervención de los animales logra mejores resultados».

Independientemente de la autonomía de los mayores que participan en una sesión con Sacra, lo que explica Minia Pardo es que la disciplina se debe respetar al máximo. Sacra está educada para entender que la residencia forma parte de su trabajo y que en ese ámbito ha de ser muy correcta y no perder de vista las órdenes de Minia.

La clase comienza con una ronda de reconocimiento, en la que Sacra olfatea a los que participan en el taller para familiarizarse. Después llegan las actividades concretas y finalmente hay unos minutos para que todos interactúen, mimen y acaricien a Sacra.

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