«SI DEL RECIBO se quita lo que no tiene nada que ver con el suministro, con lo que cuesta la energía, la luz podría incluso bajar», declaró Eduardo Montes, presidente de Unesa, la patronal eléctrica. Justamente un recibo de la luz claro para la mente más simple es una vieja demanda del consumidor y nunca atendida. Sabríamos qué es lo que se paga. Una subida del 15% en el recibo de la luz y los atrasos desde octubre suponen un golpe para los hogares con parados y para los recursos cada vez más disminuidos de las clases medias. Si la subida es una necesidad para las empresas, como justifican desde el sector, deberían esforzarse en una mayor información al consumidor. Y es tiempo de una política, con debates que concluyan y concreticen sobre fuentes de energía, que abarate costes para el consumidor doméstico o industrial.
ENDEUDAMIENTO
Entre Cataluña, Madrid y Valencia acumulan el 55,6% del total del endeudamiento de las comunidades autónomas. La deuda de Galicia representa el 12,3% del PIB. Está por debajo de la media española. Aunque ha subido en el último año, lo hizo también por debajo de la media de las restantes comunidades. Galicia pasa esta prueba como ha superado la del déficit público.
SEQUÍA EXTREMA
Llegan unas lluvias, pero los pronósticos no aclaran cuánto tiempo puede durar la actual sequía en Galicia. Alcanza ya la catalogación de extrema y es una de las más acentuadas desde que hay datos estadísticos. Parece que en el periodo abril-junio, según esas fuentes profesionales, «se registrarán las precipitaciones habituales y es posible que se invierta la situación aunque no lo suficiente como para dejar atrás la sequía». Tendremos pues que adoptar en Galicia hábitos de uso razonable del agua e impulsar acciones también en Galicia que contribuyan a paliar el problema a presente y a futuro.
