El Viveiro juvenil abandonó la última posición de la clasificación por vez primera desde hace muchas jornadas. El triunfo sobre el Milagrosa, 3-1, no solo permite a los celestes dejar dos equipos por detrás en la clasificación, sino que además supone un impulso anímico considerable para seguir optando a la permanencia, algo que parecía una utopía hace cuatro jornadas.
El equipo de Sancosmed ya había demostrado en sus últimos encuentros que estaba vivo y la confirmación llegó con un 3-1 ante un Milagrosa que llegaba a O Cembedo en la parte alta de la clasificación, pero que no pudo parar a los celestes. El técnico se mostró muy contento, «sobre todo por los chavales», ya que «se merecían un resultado y un partido así».
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