Sánchez se entrevista con Rajoy en la Moncloa

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el nuevo líder del PSOE, Pedro Sánchez, mantendrán hoy su primera reunión en el Palacio de la Moncloa, en la que constatarán las diferencias entre sus proyectos pero sondearán posibilidades de acuerdo en asuntos de Estado como la apuesta soberanista en Cataluña.

Tan sólo un día después de que el Congreso extraordinario del PSOE haya elegido a Sánchez como su nuevo secretario general, él y el jefe del Ejecutivo van a tener oportunidad de intercambiar puntos de vista sobre la situación política y económica.

Rajoy acude a la entrevista con el ánimo de mantener el mismo grado de interlocución y acuerdo que logró con su antecesor, Alfredo Pérez Rubalcaba, en los grandes asuntos de Estado, y dispuesto a conocer sus propuestas económicas.

Así lo explicó el pasado viernes la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, quien dijo que la relación entre Rajoy y Rubalcaba "era de confianza y lealtad" y, con Sánchez, esperan que se pueda mantener.

La voluntad del presidente del Gobierno es tener "una comunicación general" con el nuevo líder socialista y, "a ser posible, una interlocución, un acuerdo, en los grandes asuntos de Estado".

Rajoy desea conocer la posición de Sánchez en diversos temas económicos y también en una cuestión que considera esencial: el desafío soberanista catalán. Un punto de crucial para una semana en la que el presidente del Ejecutivo se encontrará, también en Moncloa, con el president de la Generalitat, Artu Mas.

Para este tema Sánchez ha venido defendiendo la postura que hasta ahora había abanderado también Alfredo Pérez Rubalcaba, consistente en apostar por una reforma de la Constitución, algo que teiteró ayer en su intervención de clausura del Congreso extraordinario del PSOE, en la que insistió en que la propuesta federalista que postula es la única vía que garantiza la unión de los pueblos de España.

En lo que respecta a otros asuntos se prevé como en la política económica (Sánchez reiteró ayer que su primera medida como presidente del Gobierno sería derogar la reforma laboral) o en la elección directa de alcaldes que ha propuesto Rajoy.

Ante esta iniciativa, avanzó ayer que le dará un "claro y rotundo no" y le envió el mensaje de que, si de verdad quiere regeneración democrática, "que coja la escoba y empieza a barrer su casa", en referencia a los casos de corrupción en el PP.

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