Los ladrones continúan al acecho y los establecimientos de hostelería figuran entre sus predilectos. El último ataque de los delincuentes tuvo como objetivo el mesón Pazo de Grallal, situado en la localidad vivariense de Covas, donde personas desconocidas se apoderaron de 300 euros de propinas que las camareras guardaban en un bote en el interior del local, así como de otros 150 euros que habían quedado en la caja registradora, que también abrieron, además de la recaudación que contenían las máquinas tragaperras, que no se puede precisar, debido a que estas únicamente las abren los dueños de las mismas cuando pasan a recoger el dinero.
Los autores del hecho delictivo, que ya investigan los funcionarios de la Policía Judicial del Cuerpo Nacional de Policía, con base en la comisaría de la ciudad del Landro, accedieron al local tras forzar una puerta lateral que da al callejón del establecimiento.
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