Riesgo máximo en el monte

Las altas temperaturas y el viento elevan al máximo el riesgo de incendios forestales.Huir del parte diario del número de fuegos y superficie quemada puede formar parte de una estrategia de lucha contra los incendios. Como por parte de algunos se ha propuesto evitar las imágenes de fuego, particularmente en las televisiones, en los incendios. Forman parte de las múltiples hipótesis de la lucha contra esta plaga. Pero obviamente, cerrada la temporada, la información ha de ser transparente y completa, aunque sólo sea por el altísimo coste de todos los equipos y medios de la lucha contra el fuego.Hubo un tiempo de explicaciones tajantes, sin mayor fundamento que algunos indicios, de los incendios como una acción organizada de terrorismo (económico). Se ha abandonado esa línea que a veces lo que buscaba indirectamente era justificar la ineficiencia de la política forestal y de la política preventiva y contraincendios. Surgió luego el fomento de la acción rápida, inmediata, en la actuación contra los focos de fuego. Fue un avance importante. Creció así el operativo humano y de medios de transporte, salpicado por todos los concellos gallegos para la proximidad. El historial no está, sin embargo, exento de zonas de sombra política y de gestión. Con unos y con otros en la Xunta de Galicia. Sin cuestionar la rapidez de la acción, hay que avanzar en el estudio de las causas del fuego y actuar sobre las mismas. Conocer el perfil y motivaciones de los incendiarios, tal como hará ese trabajo de la Fiscalía Superior de Galicia, que su titular, Carlos Varela, le entregará en breve a la Xunta. Hay un abanico amplísimo de hipótesis sobre las causas de los incendios. Sobre ellas hay que trabajar y tomar medidas. No parece racional que estemos condenados a mantener un ejército de personal y medios mecánicos como forma más eficaz de luchar contra este mal. También, pero no sólo, ni probablemente en primer lugar.