La vendimia en la Ribeira Sacra alcanzó ayer, según las cifras del propio consejo regulador, los 6.130.000 kilos de uva recogidos, la mejor cifra de toda la trayectoria de la denominación, constituida en el año 1996.
La cosecha del año 2010, que hasta ahora había sido la más voluminosa de la historia, había llegado a los 5.624.092 kilos de uva, de los cuales la gran mayoría, 4,9 millones de kilos, eran de uva mencía. Sin embargo, esa cifra se quedó pequeña al lado de la registrada ayer y teniendo en cuenta que los trabajos todavía no se han cerrado. Según el consejo regulador, aunque más de 60 bodegas dieron por cerrada la vendimia, una treintena de ellas todavía tiene en marcha los trabajos, por lo que para saber el dato definitivo que alcanzará la cosecha del 2011 habrá que esperar a un último balance.
Las condiciones climatológicas han sido el factor que más ha influido en los buenos resultados de la campaña, algo que también se constata en otras denominaciones gallegas como Monterrei o O Ribeiro, que estos días rematan sus trabajos con cifras récord.
Calidad
Desde el consejo regulador su presidente, José Manuel Rodríguez, apuntó que si bien la cantidad es muy importante porque permite contar con un margen mayor para abastecer la demanda del mercado, no hay que perder de vista que la calidad de la uva de este año es óptima.
«As condicións climatolóxicas foron moi importantes porque non houbo pestes nin epidemias masivas, pero tamén mellorou moito os coidados dos viticultores, que cada vez están máis pendentes de todo», recalcó.
