El alcalde de Ribadeo, Fernando Suárez Barcia, lanzó el viernes una amenaza muy seria sobre el Ministerio de Fomento y, más concretamente, sobre el ingeniero jefe del departamento de la Dirección General de Carreteras de Asturias por negarse este a asumir cualquier tipo de medida de seguridad en el Puente de los Santos, ahora convertido en autovía, ya que afirma que en realidad el viaducto es cosa de Ribadeo y Castropol, municipios que comunica.
La respuesta es totalmente insatisfactoria para el regidor ribadense, y también para el de Castropol, pero en el caso del ribadense ya avanzó que "tomamos nota" de los datos de dicho ingeniero jefe, al que avanza que responsabilizará jurídicamente en el caso de que se produzca algún accidente en este puente debido a la falta de iluminación o por la escasez de medidas de seguridad con los peatones, ya que actualmente existe una acera separada de la autovía por una verja que Barcia asegura que no está en buenas condiciones. Fernando Suárez no se anduvo con miramientos y remitió una carta a la Dirección General de Carreteras en Galicia para hacerles llegar su malestar por la actuación de sus colegas de Asturias, anticiparles su reacción y explicarles su punto de vista, que se basa en que una ley de 2013 deja claro, según asegura, que todas las autovías son competencia del Ministerio de Fomento y, por lo tanto, el Puente de los Santos no se convertirá "de ningún modo" en una excepción a dicha ley.
El alcalde ribadense anticipa que «imos estar moi atentos a calquera incidente que poida ter lugar na Ponte dos Santos, derivado desta actitude incomprensible para esixir en todos os ámbitos, incluído o xudicial no seu caso, as responsabilidades que procedan, e para o cal nos imos quedar, entre outros, cos datos dos encargados de asinar a resposta que se fixo chegar a este Concello».
La nueva legislación a la que se refiere Suárez Barcia es la ley 27/2013 y en la misma el regidor recuerda que «se restrinxe e redefinen as competencias das entidades locais». Apunta que en el propio texto «se di que é imposible que un Concello asuma estes custos», refiriéndose al mantenimiento de una autovía, «xa que o seu ámbito de actuación se limita neste campo aos de infraestrutura viaria e outros equipamentos da súa titularidade e, que saibamos, a Ponte dos Santos non é de Castropol nin de Ribadeo».
Uno de los argumentos que utiliza la Demarcación de Carreteras de Asturias para no querer hacerse cargo de los elementos de seguridad en el Puente de los Santos se refiere por ejemplo a la existencia de la acera y apuntan que fue solicitada expresamente por los ayuntamientos de Castropol y Ribadeo.
El regidor ribadense indica que utilizar ese argumento «deixa bastante clara a preocupación pola salvagarda da seguridade dos usuarios da ponte que tiña e ten o ministerio». Finalmente, la acera se construyó no solo por la solicitud realizada, sino porque el ingeniero que diseñó el puente, Ignacio García-Arango, conocía perfectamente su función y la conexión peatonal que establecería entre las dos orillas, como así sucedió.
El regidor ribadense recuerda que ni Ribadeo ni Castropol disponen de recursos para mantener esta infraestructura
