Una sonrisa asoma en el rostro de muchos de los antiguos alumnos del colegio de La Asunción de Sarria al contemplar la exposición fotográfica instalada en el centro con motivo de las bodas de oro de su fundación.
Desde aquel 11 de octubre de 1965, en el que un pequeño grupo de monjas comenzaba a impartir clases en la Casa del Marqués, han pasado 50 años en los que La Asunción formó a varias generaciones. Todas ellas tienen su protagonismo en la amplia muestra, inaugurada el pasado jueves, la cual recoge en imágenes medio siglo de historia de la educación.
El colegio buscó en sus archivos documentación histórica y rescató todas las orlas con las fotografías de las distintas promociones, entre las cuales muchos padres se buscan ahora, no sin cierta nostalgia de sus años escolares.
«Me hace mucha ilusión ver estas fotos», comentaba ayer una de las antiguas alumnas, mientras se reencontraba, feliz, con quienes fueron sus profesoras.
Las comuniones que se celebraban en el colegio y las clases de gimnasia rítmica (disciplina en la cual La Asunción fue un centro pionero) tienen también cabida en esta exposición, al igual que las excursiones o las visitas didácticas a casas de la zona rural para conocer de primera mano procesos artesanales como el cardado de la lana o la elaboración de pan.
evolución. La muestra fotográfica se completa con una recopilación de antiguos objetos, a través de los cuales se puede comprobar la evolución tecnológica: desde las primeras fotocopiadoras con manivela hasta el proyector de cine pasando por el radiocasete.
Los primeros uniformes del colegio también se encuentran expuestos, junto con viejos pupitres, entre los cuales asoma Felipe, el esqueleto con el cual cientos de alumnos aprendieron anatomía.
Ambas exposiciones forman parte de los actos de conmemoración del 50 aniversario del colegio, los cuales se prolongaron durante tres días, con la participación de alumnos de otros centros de La Asunción llegados desde distintos puntos de España. Hasta Sarria se desplazaron también, desde lugares como Madrid o San Sebastián, varias religiosas que impartieron clases años atrás y no quisieron perderse tan señalada fecha.
Los festejos comenzaron el jueves con el acto inaugural y siguieron el viernes con un recorrido por el Camino de Santiago y un gran festival en el colegio, con representación de la danza de Meigas e Trasgos y actuaciones de la Coral Polifónica y Madialeva.
La programación diseñada por el centro sarriano se clausuró ayer con una misa oficiada por el obispo de Lugo. No obstante, tanto la muestra fotográfica como la exposición de objetos antiguos se mantendrá todavía durante unos días, dada la buena acogida entre quienes recuerdan con afecto lo que para muchos estudiantes fueron unos maravillosos años.
