Quintana llama a encarar el 2014 con ''moderado optimismo'' pese a la reducción del 7% que afronta Medio Rural

La conselleira de Medio Rural e do Mar, Rosa Quintana, ha presentado ante el Parlamento los presupuestos de 2014 para su departamento, por un importe global de 583 millones de euros, 44 menos que en 2013, con una reducción del 7 por ciento, la menor del conjunto del Gobierno, salvo las Consellerías de mayor inversión social.

Quintana explicó que esta reducción, que vinculó en parte a la conclusión de fondos europeos como el de Pesca, incluye un descenso de 1,6 millones de euros en los capítulos de personal y gastos corrientes.

Señaló, además, que los ejes fundamentales del presupuesto están dirigidos a la dinamización de la economía del medio rural, a lo que se destina un 50 por ciento, hasta 307,9 millones de euros, así como a su valoración, con 115,7 millones, que se complementa con otras partidas como los 12,7 millones para la incorporación de jóvenes, un 45 % más que en 2013.

Citó también incrementos del 128 % en infraestructuras pesqueras o del 66 % para información científica y subrayó el esfuerzo para mejorar la comercialización, la calidad, la industrialización y la internacionalización de los productos de los sectores primarios.

Rosa Quintana señaló que se trata de unos presupuestos realistas, en una situación de crisis pero que "parece escampar", por lo que se puede encarar 2014 con "moderado optimismo", como indican las previsiones de crecimiento del PIB del 0,8 % y reducción del desempleo del 0,5 % o la mejora y mantenimiento de los precios de la leche, la madera o la sostenibilidad en el pescado y marisco, "sin caer en triunfalismos".

Se trata de un presupuesto que -dijo- permite encarar la situación desde la "continuidad realista y responsable", cuando "se vislumbra la recuperación".

El socialista Pablo García coincidió en que se trata de presupuestos "continuistas", aunque agregó que son un "simple ajuste lineal de las cuentas" y "no son la base de la recuperación", sino "los presupuestos de la amortización", ya que cada vez se destina más a una deuda que se incrementó desde que gobierna Núñez Feijóo en un 427 por ciento.

Criticó también que este departamento cuente con 300 millones menos desde que se hizo cargo de él la actual titular, en 2010, de los que solo 31 millones fueron reducidos de gastos corrientes y personal y el resto procedía de las partidas inversoras. Agregó, además, que se trata de las mismas memorias, partidas y programas desde hace cinco años y la situación no solo no mejoró, sino que fue a peor, por lo que deberían modificarlos aunque solo fuese para seguir el método de ensayo-error.

También se refirió a la deuda de la Administración gallega el portavoz de AGE, Antón Sánchez, que la cifró en casi 10.000 millones, cuando era de 3.700 a la llegada del actual Gobierno, y consideró una "obscenidad" las referencias a la salida de la crisis, porque solo se refieren a datos macroeconómicos basados en un aumento de la productividad a base de cobrar menos y trabajar más.

En su opinión, la intervención de la conselleira fue una "retahíla de cifras para esconder la realidad", sin abordar los problemas estructurales de estos sectores, que ilustró con el ejemplo de que en 2001 había un 33 por ciento de superficie útil agraria y hoy es del 22 por ciento.

Para Sánchez, el rural no es un problema, sino que puede ser una solución para el país y los presupuestos no solo no lo atienden como debía, sino que está perdiendo servicios básicos de toda índole, lo que impedirá la fijación de población, mientras que en el mar se pierden miles de empleos y se reducen los salarios "de forma dramática".

Por su parte, Daniel Rodas, del BNG, denunció que la pesca desaparece como sector estratégico y calificó de "rotundamente falso" que se ahorre en gasto corriente y se incremente la inversión, pues cifró en un 0,9 % la reducción en el primer caso y en el 7,4 % la del segundo.

Dijo que la política pesquera viene determinada por Bruselas, y Galicia, con las mejores condiciones, está abocada a ser donde más puestos de trabajo se pierden y donde más se desguaza o abandera en otros países, por lo que acusó a la conselleira y al conjunto del Ejecutivo de que solo dirigen su acción política a mantenerse en el poder.

Concluyó que la apuesta del actual Gobierno es por la política de propaganda y clientelar, con inversiones "tipo ciudad de la cultura". Por el contrario, el portavoz del PPdeG, José Manuel Balseiro, coincidió con la conselleira en que se trata de unos presupuestos "realistas" y adecuados al momento, en los que se sabe priorizar. No niegan la crisis -dijo-, sino que tratan de combatirla y redoblan las ayudas a los sectores primarios.

Sobre la reducción presupuestaria, recordó que en 2009, cuando el presupuesto crecía un 4,2 por ciento, esta Consellería decrecía en un 4,95 por ciento, "se le restaban recursos -insistió- en época de bonanza".

En su réplica, la conselleira defendió las políticas desarrolladas en ámbitos citados por la oposición como el precio lácteo, el desguace de barcos o los incendios forestales y se refirió al buen momento de precios de la leche, dijo que en 2006 se desguazó un 35 % más y resaltó los resultados de la reciente campaña de incendios, en situaciones muy adversas, con brigadas municipales contratadas por acuerdo de la Fegamp y con un mando único.

También hubo un debate especial sobre el proyecto de Alimentos Lácteos, del que José Manuel Balseiro dijo que su principal enemigo, desde el primer minuto, fueron los grupos socialista y el BNG en la pasada legislatura.

Por el contrario, el socialista Pablo García dijo que, desde el primer minuto, Alimentos Lácteos fue una cacicada del PP, de Samuel Juárez, Romay Beccaría y Núñez Feijóo para que dos extenientes de alcalde del PP diesen un pelotazo económico a costa de los millones públicos".