Las negociaciones abiertas por el Ejecutivo gallego para sacar la celulosa de Ence de la ría de Pontevedra continúan su curso mientras su primer accionista, Juan Luis Arregui, trata de crear una nueva sociedad con empresarios gallegos para trasladar la planta a otro emplazamiento, que todavía está en el aire. Mientras los alcaldes de A Coruña y Ferrol ya mostraron su negativa, el regidor pontés, Valentín González Formoso, reitera y mantiene la oferta de As Pontes como posible ubicación de la nueva pastera, en la que ve un posible revulsivo económico tras el cierre de la mina, como recoge el diario El Progreso en su edición impresa de este martes.
"Nosotros nos ofrecemos, después ya valoraremos", asegura. Además, y contando con que el conselleiro de Industria garantizó que el proyecto sólo saldrá adelante si se logra encontrar una ubicación que no genere rechazo social, As Pontes se erige como una de las principales opciones.
"El pueblo de As Pontes quiere la celulosa", afirma el alcalde, que subraya que "si no que se lo pregunten a la gente que se quedó sin empleo al cerrar la mina o a los que están con el trabajo en el aire". "La planta de Pontevedra genera actualmente alrededor de 300 empleos directos", dice, a los que hay que sumar los casi 1.200 inducidos; lo que supone la creación de casi 1.500 nuevos trabajos y sin tener en cuenta que se prevé que la nueva planta aumente la producción y, con ella, probablemente el número de efectivos necesarios.
Unidad
El gobierno socialista de As Pontes no es el único que apoya el traslado de Ence. Las demás formaciones políticas no ven con malos ojos el proyecto. Todos, unos de una manera más contundente que otros, aseguran que no pondrán trabas si la pastera decide asentarse en As Pontes. Además, consideran que los vecinos la aceptarán y auguran que no habrá rechazo.
El BNG está "totalmente dispuesto a estudiar el proyecto", dice Xaime Castro, el portavoz pontés de los nacionalistas, que subraya que eso no significa que lo acepten a cualquier precio. "Lo defenderemos si nos parece positivo para el pueblo y no lo haremos si lo consideramos perjudicial", asegura. "Si trae empleos y buenas condiciones, estaremos a favor, pero hay que estudiarlo todo, porque puede generar empleo pero ser una ruina para el pueblo", resalta.
Juan Eladio Pico, único representante de los populares en la corporación pontesa, se posiciona de una manera tajante. "Creo que ahora hay que decir que sí, se llame Ence o no" porque, apunta, "acabamos de perder un potencial fuerte con el cierre de la mina y la gente se da cuenta de que necesitamos industria pesada y generar empleo".
Aquilino Meizoso, de los independientes Amigos de As Pontes, no ve discusión alguna. Apoya la instalación de la celulosa en el municipio y asegura que, pese a que si Ence decide asentarse en As Pontes "va a haber muchísimas críticas", apunta que serán menos que en otros lugares porque "hay gran mentalidad empresarial".
Ayuntamientos y ecologistas
No son los partidos políticos locales, sino los regidores de concellos cercanos los que están en contra de la posible ubicación de Ence en As Pontes. El regidor de Pontedeume, Gabriel Torrente; así como el de Cabañas, Germán Castrillón; consideran que la instalación de Ence podría afectar a la ría de Ares, a las Fragas do Eume e incluso al turismo de esas zonas.
Otros, como los de San Sadurniño, Monfero o Ares perfieren no anticiparse y no posicionarse mientras no haya nada seguro sobre la mesa.
La mayor oposición está en el ámbito ecologista. La Sociedade Galega de Historia Natural (SGHN), pese a estar en contra de las celulosas y después de oponerse públicamente al traslado de Ence a As Pontes, asegura que no se movilizará si la empresa lo decide así finalmente. Piedade Viñas, la vocal de Medio Ambiente de la delegación de Ferrol, explica que "el pueblo de As Pontes no se niega a ningún tipo de industria que se les ponga” y subraya que “un alcalde tras otro, indistintamente de la corporación a la que pertenecía, demandaron a gritos una celulosa para el municipio".
El grupo ecologista Erva va más allá y denuncia que el proyecto del lago está ligado al interés por instalar una celulosa en As Pontes. "Os ritmos de recheo non responden a criterios de acidificación das augas, senón a acomodar os ritmos para atraer a Ence", dice su presidente.
Xoán Duro, de Verdegaia, defiende que se está confundiendo el tema y que no se trata de trasladar Ence, sino de mudar el sistema de gestión de papel: "hay que reducir el consumo, emplear papel reciclado y redimensionar la producción de papel para el autoconsumo", explica.
