A Pontenova muestra su rechazo a la nueva pasarela peatonal

La nueva pasarela sobre el río Eo en A Pontenova está generando una auténtica cascada de quejas vecinales y de colectivos de todo tipo. El propio alcalde de A Pontenova, el socialista Darío Campos, considera que el proyecto podría mejorarse y trabaja para conseguirlo en materia de mejora, entre otras cosas, de las barandillas. En el caso de que consigan el beneplácito de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC).

Sin su consentimiento es imposible hacer nada porque esta pasarela forma parte del proyecto, mucho más amplio, de encauzamiento del río Eo. Por el momento, el alcalde pontenovés explica que trata de encontrar con la arquitecta municipal algún resquicio legal para retocar el proyecto.

Esta semana, la Confederación Hidrográfica del Cantábrico se pronunció por primera vez al respecto de esta situación. Según responsables del organismo, la pasarela «fue concebida en todo momento como un lugar de paso peatonal» y recuerdan que «en ningún momento hubo ningún tipo de problema ni con el Concello, ni con partidos políticos, colectivos vecinales o vecinos a título particular».

Además, especifican que «cualquier modificación en el proyecto, tanto en este como en cualquier otro de cualquier Administración se debe plantear, como todo el mundo sabe, durante la fase de exposición al público, y no se presentó ni una sola alegación».

Modificaciones

Los responsables de la CHC reconocen que son conscientes de la polémica que está generando la pasarela, pero piden que no se instrumentalice políticamente «porque de lo que se habla de una posible ilegalidad, ya lo consultamos con nuestros servicios jurídicos y no hay nada, porque el proyecto se hizo antes de la entrada en vigor de la normativa actual del Ministerio de Vivienda, por la que tendría que regirse».

Eso sí, matizan que una de las cuestiones que se están planteando, la de la seguridad de las barandillas «para cambiarlas, instalar otras o reformar las actuales, desde luego que es algo que sí se podría mirar», aunque en todo momento subrayan que es importante dejar claro que «la pasarela está diseñada para ser peatonal».

Quejas

En A Pontenova, la inmensa mayoría de las quejas que se plantean a este proyecto lo hacen siempre en dos sentidos. Uno de ellos es el de que al no estar permitido el paso de vehículos la nueva pasarela «parte ó pobo en dous», mientras que la otra oposición que le hacen es que resulta especialmente incómodo que no puedan circular coches por esa zona, que entienden que, al mismo tiempo, resta cierto sentimiento de personalidad al propio pueblo.

Los partidos políticos en la oposición (PP y BNG) no tienen ningún tipo de duda al respecto y se pronunciaron ya en varias ocasiones, ambos en el sentido de que es necesario revisar el proyecto y buscar una forma de readaptarlo para el uso de vehículos, aunque sea en un solo sentido de la circulación.

La presidenta de la Asociación de Comerciantes, Catalina Lombardero, se negó a atender a este diario y a ofrecer por tanto su opinión sobre un asunto que afecta muy seriamente a uno de los colectivos más afectados, el de los empresarios y comerciantes que ella está representando y dejándoles de este modo sin voz en un asunto en el que se pronunció toda la sociedad pontenovesa.

La pasada semana, el arquitecto local Jesús Bouza, que rediseñó la plaza de Os Fornos, planteó una opción que cree válida para reestructurar el puente de modo que por el mismo pueda pasar un automóvil y, al mismo tiempo, siga teniendo uso peatonal, aunque de momento no se sabe si su propuesta tuvo algún eco.

¿VE ALGUNA SOLUCIÓN AL PROBLEMA?

Francisco Rois, Presidente del CIT

«A opción que deu o arquitecto Jesús Bouza creo que era boa»

El presidente del Centro de Iniciativas Turísticas (CIT) cree que la pasarela podría servir para que circulasen coches en un sentido de circulación «pero entón non sei se collería a xente, porque non parece que quedara espacio suficiente para todos. É algo xusto, non sei, habería que miralo porque desde logo non sei se collerían todos». Para solucionar «tanta polémica como está habendo, ó mellor se podía mirar a solución do añadido que propuxo Jesús Bouza».

Manuel Carballeira, Constructor

«A min esto non me gusta nada, se por min fora, tirábaa»

Este veteranísimo empresario del mundo de la construcción de A Pontenova se muestra totalmente disgustado con la pasarela, hasta el punto que dice que «por min, podían tirala, porque non me gusta nada de nada, paréceme unha idea malísima». Asegura que perjudica seriamente a los comerciantes y empresas que usan vehículos de transporte. Además, añade que «ter un só sentido de circulación tampouco iba amañar moito. Agora non sei se ten amaño». 

Humberto Paz, Representante vecinal

«Non me parece moi ancha, a ver o día da Queima dos Fornos»

Humberto Paz, experimentado representante vecinal aclara que «aínda non puiden ir por ela, pero desde logo non me parece moi ancha». Concede que «aparentemente, queda bonita», pero al mismo tiempo dice que «se eu fora alcalde, con todo o que hai, intentaría que a fixeran algo máis ancha para ver se se lle pode dar un sentido de circulación. Habería que ver cal sería ese sentido. E logo a ver se é segura, verémolo na Queima dos Fornos». 

Javier Acebrás, Promotor de una web local

«É unha moi mala idea, penso que habería que reformala»

La página web www.pontenova.es fue precisamente una de las canalizadoras del malestar general por esta pasarela. Su promotor, Javier Acebrás, considera que tal y como se concibió este proyecto «A Pontenova quedou partida pola metade» y además «perdemos identidade, porque se nos eliminou a ponte que de certo modo nos identificaba». Tal y como está cree que es «unha mala solución porque terían que poder pasar vehículos, e habería que replantearse esto».

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