Periódicos

Cien años cumplirá en agosto este periódico que usted tiene en las manos y cien años cumpliría también, si no se hubiese quedado por el camino, el primer periódico vilalbes del que se tienen noticias, Eco de Villalba, fundado por Manuel Mato Vizoso y José Novo Pardo y del que el Instituto de Estudios Chairegos intenta hacerse con toda la colección para editar posteriormente una edición facsimil.

No sería el único periódico vilalbés, ya que esta comarca fue pródiga en este tipo de publicaciones a lo largo de estos cien años y baste para ello señalar que desde 1908 a 1932, Vilalba contó con 18 cabeceras que nacían, como nació El Progreso, en defensa de los liberales o de los conservadores.

También cumpliría 25 años, si hubiese continuado, el periódico A Voz de Vilalba, que ha sido editado ya en facsimil por el Iescha. La iniciativa de esta publicación había partido de tres chavales por entonces de poco más de 12 años: Moncho Paz, su hermano Mario y Paulo Naseiro, que utilizaban para su impresión una “vietnamita”, lo que da idea del proceso artesanal que conllevaba, pero que llegó a tener 500 suscriptores en Vilalba, entre ellos el propio Manuel Fraga.

Con motivo de estas dos efemérides, y para conmemorarlas, los tres se han juntado nuevamente para volver a editar A Voz de Vilalba, aunque en este caso por internet, con lo que se convertirá en el primer periódico vilalbés colocado en la red.

Viene todo esto a cuento para reflexionar sobre la iniciativa que los jóvenes de hace 25 o 30 años tenían en esta materia y que se plasmaron en proyectos como La Pipa, de Becerreá, dirigida entre otros por Alfonso Becerra y María do Cebreiro y costeada también por ellos; la revista lucense Atlántico Express, en la que este menda también participó en los cuatro números que salieron; u otras también de iniciativa privada, aunque con apoyo económico de los propios centros, como es el caso de Amencer, que ha cumplido ya 25 años y que edita el Seminario de Mondoñedo, ideada por Félix Villares Monteira, autor por cierto de un interesante libro sobre los poetas que salieron del seminario mindoniense; o A Pravia, fundado en 1981 y que continúa editando el colegio Antonio Insua Bermúdez de Vilalba.

Muchas iniciativas las de entonces, con buenas ideas y poniendo dinero de sus bolsillos para sacarlas adelante. Ahora puede que haya buenas ideas pero las iniciativas pasan por el pesebre: primero la subvención y luego, el proyecto. Por eso ya no se edita casi nada nuevo en Lugo.

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