Patrimonio dos Ancares señaliza mámoas para evitar destrozos

Pide apoyo a los concellos de la comarca para preservar y dar a conocer los restos
Mámoa de Lagorzos, en Becerreá, con pinos y el cartel señalizador
photo_camera Mámoa de Lagorzos, en Becerreá, con pinos y el cartel señalizador

El colectivo Patrimonio dos Ancares ha puesto en marcha una campaña de señalización de mámoas y petroglifos para evitar destrozos por desconocimiento. Tras constatar que la actividad forestal ha dañado numerosos enterramientos megalíticos en la montaña lucense, ha decidido identificarlos con carteles y pedir a los concellos que colaboren en esta iniciativa.

Xabier Moure, miembro de Patrimonio dos Ancares, explica que "sinalizar os xacementos é unha forma de advertir aos posibles agresores de que non se pode actuar impunemente sobre o patrimonio arqueolóxico". Manifiesta, además, "a esperanza de que as administracións, que son as que teñen a obriga de preservar e dar a coñecer o noso patrimonio, tomen nota e se poñan mans á obra".

Moure indicó que ya se han puesto en contacto con algunos ayuntamientos, como el de Baleira o el de Becerreá, para advertir sobre daños importantes en algunos yacimientos.

Concretamente, Moure citó las mámoas de Cabeza do Río y Louseira, en Becerreá, y la necrópolis megalítica de Restelo, entre Baleira, A Fonsagrada y Navia de Suarna. En ambas han sido plantados pinos y la maquinaria forestal ha causado daños importantes. Apunta que en Louseira, incluso "unha pista cortou parte do enterramento" y en Restelo se han detectado excavaciones furtivas.

Los trabajos de señalización han comenzado por las necrópolis megalíticas de Chao do Marco y Lagorzos, en Becerreá, y en Pena dos Mouros, en Cervantes. También han limpiado el entorno y señalizado el petroglifo de Robledo, también en Cervantes.

Xabier Moure apunta que en Os Ancares hay localizados 72 túmulos megalíticos, 11 petroglifos y 138 castros, de los cuales solo uno, el de Santa María, en Cervantes, está debidamente señalizado.

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