La Dirección Xeral de Patrimonio Cultural ya emitió su informe sobre las causas del desprendimiento de una piedra de grandes dimensiones de la fachada del monasterio de San Salvador de Lourenzá el pasado 7 de abril. Los técnicos que inspeccionaron el edificio aconsejan realizar una revisión «máis de vagar» de la fachada para evitar el desprendimiento puntual de nuevas piezas.
El examen visual realizado por los técnicos el 12 de abril establece como causa del desprendimiento la unión de varios procesos. Por un lado, la pieza era por su geometría un lugar natural para el depósito de desperdicios, excrementos de pájaros o restos orgánicos, lo que favorecía el crecimiento de vegetación; al mismo tiempo una escorrentía de agua alimenta continuamente la vegetación, lo que da lugar a que se generen raíces de un porte considerable; además las juntas podrían estar en mal estado o existir una fisura que favoreciera la penetración de las raíces y la rotura de la cantería.
