''Padecemos unha crise económica e de valores''

El galardonado con el XIX Premio Puro Cora, Abel  Veiga Copo.
photo_camera El galardonado con el XIX Premio Puro Cora, Abel Veiga Copo.

Abel Veiga Copo, ganador del premio Puro Cora, constató que que la actual es «unha crise económica, pero tamén unha crise de valores», porque vivimos en una sociedad en la que reina «o hedonismo; unha sociedade sen Deus, unha sociedade claudicante, que queda cos brazos cruzados».

El galardonado se manifestó honrado por poder hacer su intervención de agradecimiento en presencia de representantes políticos, económicos y sociales, tanto por poder expresar sus impresiones sobre la actualidad como por hacerles patente su «respecto», porque tomar decisiones, dijo, es «moi difícil», porque «hai que dicir moitas veces que non e unhas poucas que si». En su opinión, es positivo que se expresen «opinións e impresións que poden romper co aletargamento».

Veiga Copo, con una defensa expresa del bilingüismo, pasó a expresarse en castellano para apuntar la anécdota de que el jueves pasado había visto una foto de un periódico la que una pancarta convocaba a una reunión en la Universidad Complutense de Madrid para esta misma tarde y que decía ‘Jóvenes sin futuro’, un paralelismo con el título de su artículo ‘Jóvenes y futuro’.

El profesor de Derecho Mercantil de la Universidad de Comillas llamaba a «arrimar el hombro entre todos para salir de esta situación» y apeló a la responsabilidad de que no solamente se está decidiendo nuestro futuro, sino también, «el de nuestros hijos y vuestros nietos», que forman «la generación más preparada» de nuestra historia, «pero que se va fuera» ante la falta de oportunidades que padecen en España.

El problema, según aprecia, es que «nos sentimos ricos, lo que está muy bien», dijo sin reprobar, antes de señalar que los recortes actuales afectan a campos importantes para el desarrollo, «como es la investigación». Aun así, Veiga Copo censuró que esa apreciación de la abundancia haya conducido «a no mirar dentro de nosotros mismos».

Ilusión

El premiado compensó en parte su discurso con el relato de que él mantiene un contacto permanente con jóvenes gracias a las clases de Derecho Mercantil. «Dialogo mucho con ellos porque me gusta conocer su opinión y veo que tienen ilusión», apuntó.

El docente entiende que se debe mantener esa ilusión y canalizarla: «Pueden salir a la calle, pero no pueden romper la calle», porque alteran la convivencia. Citó a Cicerón para animar a «tener una moral de ser honesto y útil» para cumplir con nuestros «deberes ciudadanos» en una sociedad en la que «los jóvenes se conviertan en protagonistas».

Para terminar su intervención, Veiga Copo hizo una referencia especial a su padre, al que presentó como su lector más destacado, que lo llama todos los días a media tarde para que le comente su apreciación del artículo diario de El Progreso. «Siempre me dice lo que no le ha gustado», concluyó.

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