El historiador Enrique Barrera, de la asociación Memoria Histórica Democrática, dará el jueves, a las 20.00 horas en la Casa Dopeso de As Pontes, una charla sobre ‘Galegos en Mauthausen’, una investigación en la que recuerda a 21 personas que sufrieron el exterminio nazi.
«cuando los nazis vinieron a llevarse a los comunistas, guardé silencio, porque yo no era comunista/Cuando encarcelaron a los socialdemócratas, guardé silencio, porque yo no era socialdemócrata/Cuando vinieron a buscar a los sindicalistas, no protesté, porque yo no era sindicalista/Cuando vinieron a llevarse a los judíos, no protesté, porque yo no era judío/Cuando vinieron a buscarme, no había nadie más que pudiera protestar». Con este poema de Martin Niemöller comienza el documental ‘Galegos en Mauthausen’, basado en la investigación del historiador Enrique Barrera, de la asociación Memoria Histórica Democrática, que este jueves estará en As Pontes para dar una conferencia en el marco de la exposición que acoge la Casa Dopeso sobre las 21 personas de las comarcas de Ferrolterra, Eume y Ortegal que padecieron el horror de los campos de concentración.
Trabajó alrededor de tres años en esta investigación. ¿Queda mucho todavía por descubrir de los campos de concentración o ya se sabe todo?
Aunque es verdad que se ha escrito muchísimo, ningún historiador dirá que ya nada queda por descubrir. Por ejemplo, ¿pudo la aviación aliada minimizar el holocausto bombardeando los ferrocarriles que conducían a estos campos?
Cuando inició su trabajo ya no había supervivientes. ¿Cómo respondieron las familias? ¿Querían saber o preferían olvidar?
Una gran mayoría agradece que se recuerde el nombre de sus familiares y se dignifique su memoria. Hubo casos de familias que desconocían que hubieran tenido un antepasado en Mauthausen.
¿Son las generaciones más jóvenes las que se preocupan más por saber la verdad?
Nosotros hablamos del «síndrome de los nietos». Las primeras generaciones ocultaron los hechos a sus hijos o les inculcaron que era un tema que no debían remover. Con la Democracia se pierde el miedo y los nietos se rebelan ante este muro de silencio y quieren respuestas. ¿Qué pasó con el abuelo?, ¿por qué lo mataron?...
