El Concello de O Páramo inició una campaña de ahorro energético y para disminuir la factura del suministro eléctrico eliminando las farolas de los lugares donde no existen viviendas habitadas y estudia ahora apagar los puntos de luz de madrugada.
El Concello comenzó en semanas pasadas a retirar las farolas de los núcleos en los que no hay inmuebles o que no cuentan con viviendas habitadas desde hace varios años. En el caso de que se trate de edificios en los que no residen personas habitualmente, solo en los meses de verano, las farolas se encenderán durante el periodo en el que se encuentran habitadas.
El municipio está renovando las farolas de las parroquias como medida de ahorro. De esta forma, en los núcleos donde hay puntos de luz naranja, estos pasarán a ser de luz blanca, ya que así consumen menos. «En tempos económicos difíciles, como ocorre en todos os Concellos, queremos controlar o gasto», indicaron.
Asimismo, está estudiando apagar la iluminación pública en los momentos de menos tránsito de vecinos, de una a seis de la madrugada, que supondría un «importante» ahorro en la factura eléctrica, informaron desde el Concello. El gobierno local calcula que podría ahorrar la factura de un mes.
EXPLOTACIONES
También se baraja instalar en las farolas que se encuentran, por ejemplo, en las inmediaciones de explotaciones ganaderas, un interruptor o un sistema que permita su encendido y apagado cuando los vecinos necesiten la iluminación. Por ahora el Concello tiene en estudio estas dos últimas medidas para conocer si se pueden llevar a cabo.
El Consistorio también informó que realizará un estudio sobre los pueblos en los que los puntos de luz públicos consumen más para saber si sufren algún problema. Según explicaron desde el gobierno municipal, en algún núcleo las farolas no se apagan hasta las diez de la mañana o incluso no lo hacen durante todo el día, por lo que se reparará el sistema.
