La directora general de Conservación da Natureza, Ana María Díaz, supervisó este jueves en el Souto da Retorta los trabajos para evitar el deterioro de la masa arborea del eucaliptal de Chavín, en Viveiro. La actuación prestó atención especial al ejemplar denominado O Avó, rodeado ahora por una valla de pino para tratar evitar que las visitas afecten a su sistema radical. Sin embargo, la plaga de hongos que le afecta y que no tiene tratamiento dificulta su pervivencia pese al cierre.
Este ejemplar, que mide 61,8 metros y tiene 7,6 de perímetro, fue objeto de un tratamiento especial para asegurar su protección. Este eucalipto centenario, igual que otros del mismo entorno, se encuentra gravemente afectado por diferentes enfermedades y hongos que dificultan su futuro, según figura en un estudio realizado por la Universidad de Santiago y la Estación Fitopatolóxica de Areeiro. Estos pudren la madera, son los hongos de suelo y artrópodos defoliadores, que provocan que las ramas de algunos ejemplares sequen y mueran.
Los técnicos de Conservación entienden que el cierre debería abarcar una distancia mayor, pero el uso turístico del espacio natural motiva que la valla se instalase más próxima de lo que todavía sería deseable, primando así el uso público del entorno.
Los hongos que afectan al eucalipto más singular del paraje natural de Chavín pudren la madera y no tienen tratamiento
La responsable autonómica, que estuvo acompañada por técnicos y los concejales del PP Celestino García y Belinda Bermúdez, comprobó las mejoras, a las que se destinaron 40.000 euros.
El espacio, que tiene 3,8 hectáreas de superficie, está ahora a expensas de la retirada de algunos restos de ejemplares podados o cortados durante dicha actuación, pero sobre todo de los árboles y ramas que resultaron dañados durante el último temporal, que cayeron por el reblandecimiento del terreno, además de los desperfectos ocasionados por las lluvias en el entorno del canal.
Las mejoras consistieron en el saneamiento de la masa arbórea, la eliminación de plantas exóticas invasoras y la reforestación con frondosas caducifolias. También repararon el canal de agua y el sendero, además de acondicionar las infraestructuras y mejorar la señalización con la incorporación de nuevos indicativos y paneles alusivos a la flora y fauna, así como al propio paraje.
Ana María Díaz resaltó como una de las labores más destacadas la poda de las ramas en el margen del sendero, retirando solo las secas o muertas. Esta actuación incluyó todas las medidas preventivas sanitarias respecto a los cortes y la desinfección de las herramientas. El saneamiento incluyó la retirada de 80 pies dañados.
INVASORAS. La eliminación las plantas invasoras se llevó a cabo de manera manual y afectó a todas las acacias existentes en el eucaliptal, que eran 40 y pertenecían a las especies melanoxylon y dealbata, Su saca se hizo por las zonas más accesibles sin introducir maquinaria ni vadear el río Landro para reducir el impacto.
El proceso de completó con la plantación de diferentes especies autóctonas.
SIN AVISO. Por su parte, la alcaldesa de Viveiro, María Loureiro, criticó ayer "la falta de respeto institucional" de los responsables de la Xunta al visitar la zona sin avisar al gobierno municipal, aunque dicho espacio sea competencia autonómica, y recuerda que el Concello limpia la entrada para evitar una mala imagen.
