Núñez Feijoo: ''No tenemos nada que agradecerle a ETA''

El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, dijo esta noche que la sociedad española no tiene "nada que agradecerle a ETA" y recordó que "las bombas y las pistolas que no se van a utilizar pueden y deben ser entregadas" y "las bandas que no van a matar, sin duda, tienen que disolverse".

Núñez Feijóo hizo estas declaraciones en Lugo, después de participar en una entrega de premios organizada por la Fundación CEL, a la que también estaba previsto que asistiese el ministro de Fomento, José Blanco, que finalmente optó por regresar a Madrid después de tener noticia del comunicado de la banda terrorista cuando pronunciaba la conferencia de inauguración del curso académico en el centro asociado de la UNED.

"Después de conocer el último comunicado de la banda terrorista ETA, las primeras palabras tienen que ser, en mi opinión, en reconocimiento y en recuerdo a las víctimas del terrorismo y, por su puesto, a sus familias", dijo Núñez Feijoo.

"No tenemos nada que agradecerle a ETA", dijo el presidente de la Xunta, porque la banda "lleva matando de forma indiscriminada desde hace cincuenta años" y, aunque reconoció que "hoy se abre una puerta a la esperanza", habrá que esperar a "que se concrete y cristalice en hechos", como son "la disolución definitiva" de la banda y "la entrega de las armas y bombas que todavía tiene". A su juicio, "sí tenemos que agradecer esta noche el trabajo de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, el trabajo de los jueces y fiscales y el trabajo de todos los que creyeron en la ley y en el Estado de Derecho".

"Si todos estamos unidos, estoy convencido de que el Estado de Derecho gana siempre. Sea hoy o después, si todos estamos unidos, el Estado de derecho ganará y la banda terrorista perderá", añadió el presidente del Partido Popular de Galicia. Núñez Feijo quiso recordar en este día a "Miguel Ángel Blanco, concejal del PP de Euskadi" y a los "guardias civiles y policías gallegos que murieron", pero también "a todos los hombres y mujeres que ETA asesinó durante estos cincuenta y un años", personas a las que dedicó su "reconocimiento más especial".

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