Navantia ha asegurado este miércoles que se ha visto "forzada a ofrecer a sus clientes desviar" a sus astilleros de la bahía de Cádiz "los buques contratados que iban a reparar en los de Ferrol en las próximas semanas" ante la huelga de las empresas auxiliares, que este jueves cumplirá tres semanas.
En un comunicado, Navantia ha aludido al caso de una embarcación de la firma BP, "uno de los mejores clientes de Reparaciones Ferrol", cuya entrada estaba prevista el 7 de noviembre, y que "prácticamente ya está decidido trasladar esa reparación a Cádiz".
El grupo naval público calcula que habrá unos quinientos empleos directos e indirectos "perdidos de forma definitiva" al no acceder a sus instalaciones de Ferrolterra otro de esos barcos. Se trata del Excalibur, que permaneció el fin de semana en las proximidades de la costa gallega en espera de novedades sobre la evolución del conflicto.
Muestra su "preocupación" ante la situación de otra embarcación que está varada en uno de sus diques de Ferrol "sin que se esté pudiendo realizar ningún trabajo"
La firma pública ha señalado que el buque finalmente abandonó la zona "para ser reparado en Francia por un astillero de la competencia". Para Navantia, "lo ocurrido con este barco, que era una de las reparaciones más importantes e intensas en mano de obra de este año", podría afectar "a la reparación del Excelsior". Añade que "otro gasero de la misma compañía", cuyo arreglo está contratado para diciembre, "ahora puede verse en peligro" si continúa el conflicto.
Igualmente, muestra su "preocupación" ante la situación de otra embarcación que está varada en uno de sus diques de Ferrol "sin que se esté pudiendo realizar ningún trabajo". De este modo, alerta en relación con esa unidad, el Golar, un regasificador que prevé "suministrar a una amplia zona de Brasil" y cuyos "directivos han advertido a Navantia de su extrema preocupación por la situación".
"Tienen obligaciones estrictas con su cliente, que de no recibir el barco a tiempo no podría abastecer de gas a Brasil", indica Navantia, considerando este hecho como un "incidente dramático".
Por ello, Navantia ha transmitido el deseo de ese operador para que se logre "una solución rápida a esta situación, que cada día es peor".
Finalmente, Navantia sugiere la posibilidad de que se incurra en el "cobro de penalidades y que ningún barco de su compañía volverá a reparar en ningún astillero" del grupo español. "Esta situación va a dejar muy tocado el negocio de Reparaciones en los próximos años, ya que al perder navieras de esta importancia costará mucho tiempo y esfuerzos recuperarlas", señala.
De esta forma, matiza que afectaría "al astillero durante varios años" y que está "en juego parte de los mil empleos anuales que genera Reparaciones".
