Música, cultura y buena comida llenan un verano sin lugar para el aburrimiento

El verano es la época por excelencia de las fiestas y Viveiro no es una excepción. Celebraciones de todo tipo congregan a miles de personas, y dos de las citas estivales están reconocidas como de Interés Turístico Nacional: la Rapa das Bestas y la romería de O Naseiro.

La oferta veraniega empieza con el San Juan en Covas el 24 de junio, una cita que goza de gran tradición y que incluye como puntos más característicos la quema de una gran hoguera en la playa y una sardiñada.

No tiene tanta antigüedad -solo un lustro- pero ha cogido una fuerza espectacular el Mercado Renacentista, que obtuvo una gran implicación social. La escenificación del desembarco de Carlos V en la playa es el punto de partida de la fiesta, que incluye un buen número de puestos artesanales en el casco, demostraciones de oficios y animación con teatro y espectáculos. Es además una buen fin de semana para la hostelería local, que organiza cenas en las calles. «En muy pocos años resulta un punto de encuentro lúdico y de festejo, que para un pueblo de servicios como es Viveiro es una fecha muy importante en el calendario», apunta el alcalde, Melchor Roel. Se celebra el primer fin de semana de julio.

Tradicionalmente el primer domingo de ese mismo mes se celebra la Rapa das Bestas en el curro de Candaoso, en la parroquia de San Andrés de Boimente. La cita, de Interés Turístico Nacional, encarna la lucha del hombre con el caballo en una intensa jornada que empieza con la bajada de los animales desde los montes hasta el curro, donde se les cortan las crines, se marcan y desparasitan. Estas operaciones dan lugar a escenas impactantes, al igual que las peleas de garañones o las carreras. Una comida campestre, música popular y verbena ponen la guinda a esta fiesta ancestral.

La Virgen del Carmen, patrona de los pescadores, tiene muchos devotos en un municipio marinero como Viveiro y se celebran fiestas en su honor en los barrios de Pénjamo -donde elaboran alfombras florales- y A Pescadería -en el que incluye una procesión y ofrenda a los náufragos-, además de en Celeiro, donde se organiza una procesión marítima. En esta localidad medio mes de julio es de fiesta, pues las Festas Patronais e do Mar incluyen, además del Carmen, las festividades del Apóstol Santiago y Santa Ana, una fiesta de la cerveza y la empanada, el festival musical Arreaocabo o la Festa da Merluza do Pincho, una cita gastronómica ineludible. Consiste en la degustación en distintas especialidades de este producto de máxima calidad, pescado por barcos de Celeiro al anzuelo en aguas de Gran Sol.

RESURRECTION

Agosto empieza con el Resurrection Fest, una cita que ha convertido a Viveiro en la capital española del hardcore, el punk y otros estilos de música alternativos. El festival, con pocos años de andadura, no deja de crecer y reúne ya a más de 60 bandas y cerca de 30.000 personas. «El Resurrection Fest fue la concreción de un proyecto de libertad, música alternativa y cultura, que por su crecimiento tan rápido se ha convertido en uno de los factores culturales más importantes del calendario», dice el alcalde, Melchor Roel, que prefiere destacar «la mezcla de distintos tipos de música y gente que viene de todas las partes a nivel internacional» a su indudable impacto económico, pues según un estudio de la Universidade da Coruña durante las jornadas del festival se genera un volumen de negocio en Viveiro de 1,4 millones de euros.

Los organizadores trabajan ya en la edición de este verano, que será los días 1, 2 y 3 de agosto, y para la que ya están confirmados los primeros nombres, entre los que figuran Bad Religion, Black Flag y Trivium. El abono anticipado para los tres días cuesta solo 50 euros -menos de un euro por banda participante- y el Concello habilita dos zonas de acampada gratuita para los asistentes.

Otra cita musical de este mes es la Mostra Folklórica Internacional, que llena Vivero de colorido y ritmos tradicionales de distintas regiones y países. Entre otras actividades, contempla un concierto folk, el Desfile de las Naciones del Mundo y una gran gala en la que actúan grupos de cinco países extranjeros, que en la última edición fueron Siberia, Argentina, Indonesia, México y Venezuela, además de una agrupación española y el grupo anfitrión, Bágoas da Terra.

UN MES SIN FIN

Las fiestas patronales de Viveiro se celebran en honor a San Roque y tienen sus días fuertes a mediados de mes, aunque prácticamente todos los días de agosto hay alguna actividad lúdica o cultural gratuita. En la vertiente musical las patronales tienen su epicentro en la Praza Maior, que se transforma en «un auditorio al aire libre por el que desfilan todas las sensibilidades musicales», dice Roel, pues el objetivo es ofrecer estilos distintos que se adecúen a los gustos de distinto tipo de público. Por ejemplo en la última edición desfilaron Los Suaves, La Década Prodigiosa o Berrogüeto, entre muchos otros artistas, además de orquestas, bandas y corales.

El 16 es el día de San Roque, festivo local, en el que se sigue realizando la tradicional romería en la capilla del monte homónimo del santo. Hay misa en la ermita, procesión y grupos de familias y amigos se reponen de la fiesta comiendo en el área recreativa. Precisamente el alto de San Roque es un buen lugar para ver los fuegos artificiales que hay por la noche y que con su luz hacen la ría todavía más bella.

Completan las actividades un desfile de gigantes, juegos infantiles, la sardiñada de As Nogueiras, exposiciones, la Feira do Libro de Galicia, la feria de artesanía o la fiesta gastronómica del percebe, que se celebra en Area a principios de mes y que resulta un gran éxito, ya que el producto, sustraído en la zona, es exquisito. También hay actividades deportivas, con competiciones de fútbol, baloncesto, fútbol sala, natación, ciclismo, ajedrez, tiro al plato, piragüismo y atletismo.

NASEIRO

Del 23 al 27 de agosto se celebra la otra fiesta de Interés Turístico Nacional, la Romaxe do Bo Xantar, popularmente conocida como O Naseiro. Una fiesta con todas las letras, donde no faltan comida, bebida y música, así que la diversión está asegurada y eso lo saben las miles de personas que participan. Uno de sus actos más característicos es el descenso humorístico del río Landro, en el que jóvenes -y no tan jóvenes- navegan el río disfrazados en las estructuras flotantes que idearon.

Pero no solo el verano es fiesta en Viveiro, ya que el Concello celebra de forma especial otras fechas como el Carnaval, donde destaca su singular entierro de la sardina, que incluye un recorrido por el casco con los participantes vestidos con sábanas blancas y las Alpuxarradas, que es una velada donde los vecinos lanzan sátiras. El Ayuntamiento también potencia la Cabalgata de Reyes.

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