Decenas de vecinos se acercaron este martes al cementerio de Callobre para acompañar a los familiares de Amelia Otero, Marisé Iglesias y Manuel López, los tres miembros de una misma familia que fallecieron de forma violenta el pasado fin de semana.
La misa se celebró en la iglesia parroquial y, posteriormente, los féretros fueron trasladados al cementerio, para ser inhumados.
La teoría de que se trata de un caso de violencia en el hogar —por el disparo a la anciana— pero no machista —porque la esposa se suicidó—, fue corroborada este martes por la subdelegada del Gobierno en Pontevedra, Ana Ortiz, que reiteró que "no hay antecedentes" por maltrato entre los fallecidos y circunscribió la "desgracia" al ámbito familiar, por lo que la investigación "no tiene mucho más recorrido".