La Consellería de Medio Rural acaba de adjudicar trabajos de repoblación y de aplicación de tratamientos silvícolas a desarrollar en distintos montes de la provincia de Lugo, actuando sobre un total de 1.350 hectáreas dedicadas a la producción de madera.
Estas actuaciones se agrupan en trece contratos que suponen una inversión de 2.065.242 euros, son de carácter bienal y tienen por objeto potenciar la actividad forestal como alternativa económica pujante para el progreso de la provincia.
Algunos de estos trabajos darán comienzo de manera inmediata, especialmente los de repoblación, que por motivos de crecimiento de la planta deben realizarse preferentemente en otoño o en primavera. Ésta, según indicó la Xunta, se realizará fundamentalmente con pinos, aunque en zonas de valle también se plantan distintas especies de frondosas, como castaños y robles.
Las tareas de repoblación afectarán a 370 hectáreas de montes en distintos ayuntamientos. Los contratos afectan a Lugo y Friol (90,59 hectáreas), Folgoso do Courel (28), Castro de Rei, A Pastoriza y Pol (52,08), Castroverde, O Corgo, Guntín, Monterroso y Portomarín (77,06), Begonte, Guitiriz y Xermade (49,52) y Baralla y Navia de Suarna (72,5 hectáreas).
Por su parte, los tratamientos silvícolas consistirán básicamente en tareas de poda y desbroce que persiguen, por un lado, la mejora de la calidad de la madera y su valorización en el mercado, y por otro, anular potenciales riesgos para la aparición y la extensión de los incendios forestales. Los trabajos se llevarán a cabo a lo largo de los dos próximos años, si bien está previsto que las actuaciones estén rematadas a mediados del año 2010.
Los tratamientos se aplicarán en 980 hectáreas de monte pertenecientes a 19 ayuntamientos de la provincia. Se trata de siete actuaciones diferenciadas, que se desarrollarán en los ayuntamientos de O Incio, Samos y Sarria (en total, 145,7 hectáreas), Friol (97,48), Baralla, Becerreá y Navia de Suarna (206,45), Castro de Rei, Meira, A Pastoriza y Pol (129,77), Guntín y Portomarín (134,27), Vacía, A Fonsagrada y Negueira de Muñiz (162,54) y Castroverde, O Corgo y O Páramo (104,25 hectáreas).
La delegada territorial de la Xunta, Raquel Arias, subrayó que el “fin último del programa de ordenación de explotaciones forestales es crear riqueza, no solo porque incrementan la calidad y el valor de la madera que se produce, sino también porque activan el mantenimiento de cerca de 200 puestos de trabajo a través de distintas empresas vencelladas a Lugo y, de este modo, contribuyen a fijar población en medio rural”.
En todos los casos se trata de montes de gestión pública, en los que se actúa en virtud de un convenio de colaboración existente entre el departamento autonómico de Medio Rural y los propietarios.
