Medallas

EL CONCELLO DE VIGO retira la medalla de la ciudad a Julio Fernández Gayoso con los votos de PP y BNG. El PSOE, con mejor criterio, se abstuvo. No es la vía, ni puede ser, para valorar la gestión de los directivos de las antiguas cajas. La exigencia de responsabilidades sobre el acelerado final de las cajas gallegas no se resuelve con concesiones al populismo. Habrá que buscar y ofrecer explicaciones de gestión y de responsabilidades políticas, no solo ni principalmente gallegas, como quieren hacer ver algunos. Habría que exigir a quienes por acción u omisión aprobaron desde los órganos de gobierno cuentas y gestión año tras año. Y hay una exigencia para quienes tenían la responsabilidad inspectora.

DIMISIÓN

Las razones de la renuncia de Xosé Luis Méndez Ferrín como presidente de la Real Academia Galega (RAG) obedecen, si nos atenemos al escrito de dimisión, a la labor de oposición que encontró en algunos miembros de la corporación, «unidos a persoas externas». ¿Es una pelea entre grupos de la cultura gallega institucionalizada? Algunas interpretaciones así lo quieren presentar. Otras parecen buscar una larga mano política externa. Como hecho concreto, las informaciones que se publicaron meses atrás sobre contrataciones de personal en la RAG sin duda influyeron en la decisión de retirada del presidente. No era la imagen que políticamente cabría esperar. Es evidente que, con o sin batallas entre grupos, piden concreción, y el abandono de cualquier superposición, los campos de responsabilidad de la Real Academia Galega, Consello da Cultura Galega, Instituto da Lingua y Centro de Estudios Ramón Piñeiro, por citar algunas instituciones culturales. Aunque parezcan claros sus cometidos, a veces los hechos muestran que no están tan diferenciados.

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