Marchena revoluciona al Deportivo

El 'jefe' Carlos Marchena tiró del Deportivo (2-0) en su primer partido de Liga como titular esta temporada y agravó la situación del colista, el filial del Real Madrid Castilla, que jugó casi toda la segunda mitad con diez por la expulsión del uruguayo Leandro Cabrera y que sigue sin puntuar a domicilio.

El equipo coruñés se adelantó en el primer cuarto de hora con una media chilena de Marchena y después gestionó el partido sin florituras y lo sentenció en el descuento con un gol de Luis Fernández para lograr su segundo triunfo en casa, un resultado que le permite mantenerse en los puestos que dan acceso a las eliminatorias por el ascenso.

La aparición de Marchena, campeón de Europa y del mundo con la selección, fue óptima para el Deportivo, que le había reincorporado a principios de septiembre cuando sólo quedaban unas horas para que se cerrara el plazo de fichajes.


El veterano central aportó más solidez defensiva a un Deportivo que no tenía demasiadas fisuras pero que cojeaba a balón parado. Y fue precisamente en una jugada de estrategia, pero en ataque, a los catorce minutos, cuando encaminó la victoria del conjunto coruñés.

Fue vital en ataque y, minutos más tarde, providencial en defensa cuando le robó el balón a Raúl de Tomás delante del argentino Germán Lux después de que el delantero del Castilla le hubiera cogido la espalda a la zaga.

El filial blanco, a pesar de alguna imprecisión en el centro del campo, quiso el balón en Riazor, un campo acostumbrado a ver al primer equipo blanco y no al segundo, al que no recibía desde finales de la década de los ochenta.

El conjunto de Alberto Toril volvió a incomodar al Deportivo antes de que se cumpliera la media hora con una acción personal de Burgui, que se abrió paso desde el flanco derecho del área blanquiazul, dejó atrás a seis rivales, pero acabó la jugada sin fuerzas, con un disparo flojo que atajó Lux.

El partido llegó al descanso con otro lanzamiento, esta vez de Benavente a las manos del portero del Deportivo, y en la segunda mitad se le puso aún más cuesta arriba al equipo madrileño, que sufrió en cuestión de segundos la expulsión del central uruguayo Leandro Cabrera por una entrada a Juan Domínguez que fue castigada con severidad por el colegiado.

Con diez, el Castilla no le perdió la cara al partido ante un rival que se conformó con esperarle en campo propio y cerrar espacios, quizás por el miedo a que se le escapara una victoria que Riazor solo había celebrado esta temporada ante el Alcorcón en septiembre y que se consolidó en tiempo de descuento con un tanto de Luis Fernández.

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