Víctor Alonso se encarga de vender artículos de broma a domicilio sin mucha suerte pero, como en todas las historias, siempre hay un punto de giro que hace que todo cambie su perspectiva y puede que a Alonso le pase algo similar que a su creador, Luis Usón.
Este coruñés, que comenzó sus estudios de realizador en la Escuela de Imagen y Sonido de A Coruña, tuvo la oportunidad de trabajar en distintos ámbitos: televisión, el teatro y cine; hasta que en el 2009 decidió morder la manzana del 3D realizando el Master en Creación y Comunicación Digital, de ahí surgiría, mediante una dedicación constante, su creación: El club del bromista. Gracias a ella, Luis Usón, fue galardonado con el premio a mejor corto nacional en el festival de Mundos Digitales.
Pregunta: Después de formarte como realizador tienes la oportunidad de trabajar en distintas producciones televisivas, en películas, obras de teatro… desempeñando labores de atrezzo, regidor de atrezzo y director de arte. ¿Te consideras una persona polifacética?
Respuesta: No. Me gusta la narración cinematográfica y la parte artística, trabajar con animación y con diseños propios. Pero no me considero polifacético porque no soy músico ni poeta.
P: En 2009 decides realizar un máster en animación 3D. ¿Es importante formarse en distintos campos para abrirse un hueco en el mercado audiovisual o es una cuestión de suerte?
R: Depende un poco al campo al que te vayas a dedicar, hay campos más técnicos en los que es inevitable una formación. En general, siempre hace falta una formación académica específica que sirve de base preliminar porque donde aprendes realmente es trabajando.
También es cierto que hay gente que ha comenzado trabajando, desde abajo, y ha llevado una carrera interesante.
P: En el caso del Galicia, existen muchos impedimentos por parte de las instituciones públicas para llevar a cabo un proyecto audiovisual?
R: Pues no sabía decirte porque el corto es independiente, no tiene ninguna subvención. No ha tenido impedimentos pero ayudas tampoco porque ha sido un proyecto autofinanciado.
P: ¿Has realizado algún otro proyecto audiovisual y has tenido que depender de esa ayuda o no ha sido así?
R: Proyectos en el que yo fuese director o el interesado en llevar a cabo el proyecto no. Pero conozco proyectos que han sido subvencionados y no creo que sea muy complejo conseguirlas.
P: ¿Con que género te sientes más cómodo?
R: A veces se confunde la animación con género pero es una técnica; quizás, dentro de la animación, con la técnica con la que me siento cómodo sería la comedia de humor negro.
P: Centrándonos en el corto, ¿qué nos podemos encontrar en El club del bromista?
R: Es un cortometraje, de ocho minutos de duración, donde he intentado que la parte técnica esté muy cuidada. Hay una historia sencilla, que pretende hacer reír, un poco oscura. El personaje es gris, se trata de un perdedor, que tiene una oportunidad en su vida de arreglarlo todo pero que no todo sale como él espera.
P: ¿Cómo surgió la idea?
R: Cuando acabé el máster había dos posibilidades, una era con los trabajos del máster de las prácticas y de los ejercicios hechos en clase, hacer una realy o un vídeo de muestra o hacer un cortometraje. A medida que iba haciendo el corto, la historia se fue haciendo más grande y llegó a un punto que tuve que dedicarle un año y medio para obtener unos mayores resultados más allá del simple trabajo: presentarlo en festivales. Pero para hacer eso ya no podía hacerlo sólo y tuve que encontrar a gente que estuviese dispuesta a colaborar como Sergio Pena, que ha compuesto la música del cortometraje; Daniel López, que ha hecho el diseño del sonido; Evaristo Calvo, que es el que le da la voz al personaje principal; Miguel Corujo, que ha hecho labores de montaje y de postproducción y, por último, Omar Rabuñal, que me ha ayudado a encontrar una estructura narrativa lógica porque yo tenía muchas ideas sueltas de atmósfera pero había que buscarle un hilo conductor más claro.
P: Estás contento con el resultado?
R: Si, con el corto estoy muy contento y orgulloso al igual que la gente que participado en él pero que esto me vaya a abrir puertas o no, ya es una cuestión de suerte y de que la gente lo valore.
P: Evaristo Calvo es el actor que pone voz al personaje principal. ¿La elección de este actor tiene algo que ver con el personaje al que representa o fue fruto del azar?
R: No, de hecho quería que fuese desde el principio porque trabajé con él en la tele, en El show de los tonechos, cuando él fue director; él tiene un humor que se parece un poco al mío y Evaristo Calvo hace muy bien de perdedor [risas] .No es que estuviera una inspiración física pero sí intenté que la voz, que pone cuando actúa, que es un poco grave y ridícula, y el personaje fueran todo uno.
P: De momento, en tu página Facebook podemos ver un anticipo de tu corto. ¿Cuánto tendremos que esperar para verlo online?
R: Ver el cortometraje íntegro en internet dependerá un poco de cómo vaya funcionando en festivales porque en muchos de ellos no le hace mucha gracia que el corto esté accesible en internet; así que hasta que no se acabe el circuito de festivales no se suele publicar de acceso gratuito a todo el mundo, que suele ser después de un año.
P: ¿Piensas promocionarlo a nivel nacional?
R: Si, de hecho lo hace una empresa de Barcelona, que se llama Marvin & Wayne, que se encarga de presentarlo a nivel nacional e internacional. De momento, el único festival que lo ha cogido ha sido Mundos Digitales y el resto de festivales a los que lo presenté no sé si me lo han seleccionado porque todavía no han hecho público.
P: Ya tienes otro proyecto en mente?
R: De momento no, tan sólo pienso mover el corto en festivales, que es donde puedo relacionarme con la gente del medio. Quizás dentro de unos meses me vaya planteado proyectos o igual me surge la posibilidad de trabajar en alguna empresa.
