Lugo se desploma

LUGO SE cae a cachos, y no precisamente por sus dos mil años de antigüedad. El pasotismo (negligente) de los propietarios de muchos edificios favorece el desplome sostenido de fachadas. Ahora mismo son varios los acordonados por el desmorone de cascotes, con suerte hasta ahora por no alcanzar a viandantes, que todo se andará: San Marcos, cuartel de San Fernando, Castelao... son algunos de los puntos localizados, pero hay bastantes más. El Concello sanciona, o dice que lo hace, a quienes se resisten a rehabilitarlos, con multas acumuladas de hasta 30.000 euros. Pero los responsables, como si oyesen llover: pasan olímpicamente de las advertencias. Convendría saber si los correctivos son efectivos o solo testimoniales, pero en cualquier caso debe haber resortes legales, por vía de urgencia, para adoptar medidas serias. En casos menos graves se toman. Podría esperar si solo fuese un problema estético, pero está en juego la seguridad y la vida de las personas. ¿Quiénes son los responsables legales (y morales) si ocurre una desgracia?

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