Lugo es la provincia gallega que más autónomos perdió en el último año, al tener ahora 36.509, que son 256 menos que hace doce meses. Así lo denunciaron desde Auga, la asociación que agrupa a los trabajadores por cuenta propia de Galicia. Su portavoz, Lisardo Domínguez, acusó a la Xunta de «ter esquecido por completo ao colectivo».
Desde Auga, asociación que ya advirtió hace meses de la «enorme temporalidade e a baixa calidade das novas altas», denunciaron que esa tendencia a la baja no se logró frenar ni en agosto, un mes en el que habitualmente se producen altas pero en el que esta vez en Galicia se perdieron 122 autonómos en relación a julio. Lugo perdió dos y peor fueron las cosas en las otras provincias, ya que Pontevedra perdió 48, hasta situarse en 67.754; y A Coruña y Ourense, 36, para quedar con 88.191 y 25.952.
Domínguez reclamó a las administraciones «menos propaganda» y que escuchen al sector para afrontar un problema ante el que «nin os partidos tradicionais nin os novos propoñen medidas».
El portavoz de Auga achacó esas continuas bajas -en agosto, sobre todo en el sector agropecuario- a problemas estructurales como las altas cuotas que hay que satisfacer, a diferencia de lo que pasa en otros países, o la presión fiscal. Añadió que en Galicia las dificultades se agravan por el envejecimiento poblacional y la despoblación del rural, que hacen muy difícil dar el relevo en algunas actividades. Como ejemplo, dijo que en España la edad media de un autónomo es de 42 años, pero en la comunidad se eleva hasta los 45 y en Lugo y Ourense llega a los 50.
Desde el colectivo creen que esa sangría de autónomos es aún mayor ya que hay empresas que, para evitar cotizaciones a la Seguridad Social, obligan a sus trabajadores a darse de alta por cuenta propia, precarizando el empleo y creando «falsos autónomos».
CONSULTA AL SECTOR. Una de las cuestiones en las que hizo hincapié el portavoz de Auga es en que no se tiene en cuenta al sector a la hora de analizar esta situación en la comunidad. «Buscar unha solución pasa, entre outras cousas, por escoitarnos para planificar o futuro e saber cara onde iremos nos próximos anos».
Domínguez denunció, en esa línea, que no se invitó a la asociación a reuniones del Consello Económico e Social de Galicia para abordar esa problemática. «Se non nos chaman non sei que información van sacar», criticó, tras lo que instó a la administración a que «faga as cousas con seriedade».
