Unos 75 trabajadores de la empresa Vestas en Chavín, sobre los que pesan un Ere de extinción y otro de suspensión temporal, se desplazaron este martes hasta el Parlamento de Galicia para participar en el debate de una iniciativa del BNG que pedía la implicación de la Xunta en el mantenimiento de los puestos de trabajo, que fue aprobada por unanimidad. Sin embargo, este acuerdo sabe a poco al comité de empresa, que pide al presidente autonómico y a los conselleiros de Industria y Traballo que medien con la dirección de la firma para evitar despidos.
Está de acuerdo con esta petición el diputado del BNG Cosme Pombo, quien cree que Feijóo debe "facer cumprir os compromisos a unha empresa que recibiu axudas con diñeiro público que se contan por millóns de euros, parte deles concedidos pola Administración autonómica, e que non permita a eliminación de ningún posto de traballo". A su juicio "este procedemento de despedimento colectivo non ten xustificación, porque os datos din que é rendible e competitiva".
Pombo lamentó que "se estivera feita a variante de Viveiro, que o PP non quixo acometer, a fábrica que Vestas levou a León podería estar hoxe en Viveiro e en vez de 150 traballadores habería 300". Añadió que "os produtos de Vestas teñen que levalos a Vigo, cando está Alcoa ao lado e poden facer unha iniciativa para sacar a produción polo seu dique".
El BNG rechazó incluir en su iniciativa una enmienda del PP que defendió el diputado mariñano José Manuel Balseiro, "consensuada cos traballadores", que pedía a la Xunta impulsar todas las medidas a su alcance para "intentar garantir os postos de traballo e a actividade industrial desta factoría". Balseiro transmitió el "total e incondicional apoio" de su partido a la plantilla y recordó que el PP hizo mucho por Vestas, empezando por facilitar su ubicación en Viveiro. Añadió que, aunque esta enmienda fuera rechazada, votarían a favor porque están comprometidos con los trabajadores. "Con el apoyo solo no vale, hay que luchar por la gente", dijo en ese momento un empleado desde la tribuna.
La diputada del grupo mixto Consuelo Martínez acusó al PP de "esixir cada vez menos requisitos ás grandes empresas para presentar unha demanda colectiva de despido" y, desde Age, Ramón Vázquez culpó también "á reforma electoral do PP". El socialista mariñano José Ramón Val dijo a los populares que "se teñen tan claro" su apoyo a Vestas, "que non aproben o Ere de extinción" y los instó a "asumir os seus compromisos coa empresa e cos traballadores, que están nunha situación moi complicada".
Solo unos pocos trabajadores pudieron acceder al hemiciclo para presenciar el debate y el resto estuvieron concentrados en el exterior. Antes de empezar la sesión se acercaron a ellos políticos de todos los colores para transmitirles su apoyo.
Por lo demás, el comité y la empresa retoman este miércoles las negociaciones, que están siendo difíciles. Hasta ahora la dirección ofreció rebajar de 54 a 32 el número de despedidos a cambio de una mayor flexibilidad. La plantilla hará este jueves una manifestación.
