Los nueve trabajadores de la piscina municipal de Vilalba inician desde hoy una huelga de carácter indefinido como medida de protesta por la difícil situación laboral que están atravesando, ya que acumulan seis meses sin cobrar sus sueldos mientras que la empresa que gestiona las instalaciones, Grupo Pazos, se encuentra en concurso de acreedores.
La plantilla acordó empezar definitivamente el paro, que supondrá el cierre total de las instalaciones, tras ver como los sucesivos plazos que fueron dando para favorecer las negociaciones se fueron cumpliendo. De hecho, la
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