Los pescadores ven abandonado el río Eo

En plena temporada de pesca, el concejal socialista de A Pontenova y presidente del Centro de Iniciativas Turísticas, Francisco Javier Rois, aprovecha para instar a la Xunta de Galicia a que limpie el río Eo. Tanto él, como gran parte del medio centenar de cañistas que este martes ocupaban los principales cotos del cauce creen que el río está abandonado.

"Temos un convenio coa Consellería de Medio Ambiente, pero aínda así non chega. Case todos os cotos están con ramas e sen limpar, sobre todo en Salmeá, Xinzo e Vilarmide, e debe ser a Xunta a que os limpe", matiza el edil y también pescador.

Tras el pregón de la Festa da Troita, el regidor pontenovés, Darío Campos, avanzó que negociará con el resto de concellos ribereños, también el asturiano de San Tirso de Abres, para crear una plataforma con la que puedan presionar conjuntamente a las distintas administraciones a fin de que limpien y mantengan el río en perfecto estado.

Pese a todo, el Eo arroja este año unas piezas de considerable tamaño. Este mismo martes, un pescador de A Pontenova, Pablo Méndez, capturó un salmón de 4,700 kilos, hacia las ocho y media de la mañana. A otro cañista, Xoel Bouso, de 24 años -que pescó otro de casi cinco kilos el año pasado en Pontevedra- se le escapó un ejemplar de seis kilos.

La Asociación Profesional de Axentes Forestais de Galicia informó este martes de que la temporada de pesca del salmón y el reo se prolonga hasta el 31 de julio, "agás nos tramos compartidos do Eo, onde o período salmoneiro rematará o 15 de xullo". Los jueves no festivos sólo se puede pescar sin muerte y los lunes continuarán siendo inhábiles.

Varios tramos de este río presentan la particularidad de estar compartidos con Asturias, donde también tienen un especial interés en conservar todo lo posible la pesca del salmón y que proponen medidas conservacionistas, como hace la Xunta, aunque lo cierto es que no existe una política bien definida de colaboración entre ambas administraciones, lo que lleva a que se produzcan pequeños desajustes que hacen que en algunas zonas sea más positivo pescar en áreas dependientes de la comunidad asturiana que de Galicia.