Los paseos en barca por el río Cabe que organiza cada verano desde el año 2005 el Ayuntamiento de Monforte se estancaron en las últimas tres temporadas en el millar de salidas. En 2013 se realizaron 1.081 viajes, en 2014 fueron 1.056 y el pasado año también se sobrepasaron ligeramente los mil trayectos. En cada recorrido pueden ir hasta seis personas, las que caben en cada embarcación.
Los vecinos de Monforte y los usuarios de este servicio consideran que se puede mejorar y que con un poco más de promoción podrían recuperarse los 1.625 paseos del año 2011, la mejor cifra de toda la trayectoria de la iniciativa.
José Luis Saco es el barquero del club Quixós que cada verano desde el año 2013 atiende el servicio. Explica que tanto en 2015 como en 2014 los paseos no comenzaron hasta bien entrado el mes de julio y que, en parte, eso explica que los datos de esos años fuesen inferiores a los de los anteriores. También hubo cambios en los horarios pero, aún así, apunta que el número de viajes por temporada está estabilizado en el millar desde 2013.
Este año los paseos arrancaron el 15 de junio, igual que en los mejores años de la actividad, por lo que cabría esperar que al final del verano se cerrasen mejores números que los de ejercicios anteriores. Por ahora el servicio sigue la tónica habitual, junio fue un mes flojo y julio comienza a remontar ayudado por el buen tiempo y la llegada de más visitantes a la ciudad.
Los usuarios ven un acierto que los recorridos sean en barcas tradicionales, pero insisten en que hay que cuidar más el río
LAS MEJORAS. Los vecinos que a diario se concentran en el entorno del parque de Os Condes, donde se cogen las barcas, y algunos de los usuarios explican que el servicio tiene margen de mejora. Apuntan que, por ejemplo, sería bueno hacer algún alto en el recorrido y creen que las carencias más urgentes se refieren a la promoción y al propio cuidado del río.
Consideran que si se le diese más visibilidad a la iniciativa y se mejorasen algunas zonas del cauce en las que hay bastante maleza, subiría la aceptación del servicio.
Todos coinciden en señalar que los paseos son muy agradables, relajantes y que acercan una visión del Cabe que no se percibe desde tierra. Añaden que su precio es muy asequible y que la medida de usar barcas tradicionales fue todo un acierto. Se adapta para usuarios de todos los perfiles, familias con niños y tercera edad incluidos. También insisten en que no se puede descuidar el entorno ni la promoción de los paseos.