Los dueños de solares de A Fonsagrada tienen 2 años para limpiarlos y vallarlos

Una ordenanza obliga a mantenerlos acondicionados ►Las obras del cerrado estarán exentas de tasas

El pleno del Concello de A Fonsagrada ha aprobado una ordenanza que obliga a los propietarios de solares situados en suelo urbano a mantenerlos limpios y cerrados. Tienen un plazo de dos años para acometer los trabajos de acondicionamiento necesarios. A partir de ese momento, el Concello podrá sancionar a quien no cumpla la normativa.

La ordenanza entra en vigor este jueves, una vez publicada en el Boletín Oficial de la Provincia. Su objetivo es garantizar unas «adecuadas condicións de seguridade, salubridade e ornato» en las parcelas situadas en zona urbana.

La normativa afecta a los solares que tengan en alguno de sus frentes calzada pavimentada y aceras. La obligación de vallado solo afecta a la parte que esté directamente en contacto con la vía pública.

La ordenanza estipula que las parcelas deben estar «libres de refugallos, residuos e nas debidas condicións de hixiene, salubridade e seguridade e ornato público». Estas condiciones implican que deberán estar «libres de brozas e herbas que supoñan un perigo para a seguridade pública». El Concello especifica que la limpieza de los terrenos urbanos no podrá hacerse mediante quemas.

En base a estas disposiciones, «queda prohibido baleirar, verter e depositar lixos, cascallos, mobiliario e calquera clase de residuos en solares, parcelas e outros espazos de titularidade privada e pública».

La ordenanza aprobada por el pleno de A Fonsagrada establece las características que deben tener los cierres de las fincas. Los propietarios deberán asumir los gastos de las obras, pero estarán exentos del impuesto de construcciones e instalaciones.

El cierre deberá tener una zona opaca en la parte inferior, de una altura comprendida entre 50 centímetros y un metro. Este zócalo será «preferiblemente de pedra, aínda que poderá realizarse en bloque de formigón ou outros materiais de fábrica, que deberán ser debidamente enfoscados e pintados por ambas caras». La parte superior de la valla deberá ser traslúcida, preferiblemente de madera, aunque la normativa también admite la malla metálica. El cierre tendrá una altura máxima de dos metros.

El Concello podrá iniciar de oficio o a petición de cualquier interesado un expediente para exigir la limpieza o cierre de cualquier parcela. Los propietarios tendrán un plazo de dos años a partir de este jueves para acondicionar sus solares. A partir de ese momento, podrán ser sancionados.

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