Los centros comarcales de la Costa, situados en Mondoñedo y en Viveiro, continúan abiertos a pesar de la falta de servicios que sufren y la carencia casi absoluta de actividad durante este último año. Los edificios que los albergan no cuentan con personal para la limpieza ni para el mantenimiento y la falta de seguros obligó a dejar de organizar las exposiciones temporales.
En el caso mindoniense, la actividad se reduce a albergar el Centro de Interpretación do Camiño de Santiago y a la atención a los peregrinos y visitantes que se acercan a solicitar información. «Intentamos atender a xente que chega o mellor posible, pero a información que temos é a que nós mesmos collemos da oficina de turismo municipal, porque non recibimos ningún tipo de material», explican desde el centro.
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